Formación y trabajo en red para buscar un empleo a personas con enfermedad mental

redacción LA VOZ

SOCIEDAD

O.G.

La Fundación ?la Caixa? apoya el plan de la asociación Alborés en Monforte y Chantada

01 dic 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Todos son distintos y cada uno presenta unas necesidades específicas de formación. Pero todos tienen algo en común: son personas con algún tipo de enfermedad mental, en diverso grado, que buscan un empleo. No es fácil en sus circunstancias, porque al estigma social se unen los efectos derivados de su patología, que suelen traducirse en problemas de concentración, de memoria o atención, o las consecuencias de la medicación que reciben, que les impiden conducir, con lo cual tienen aún más limitado su acceso al trabajo o a la formación. Y a todo ello se añade una barrera más: viven en zonas rurales o pequeños municipios del sur de Lugo, considerada como una de las zonas de mayor exclusión territorial de Galicia.

Sin embargo, no están solos. Reciben el apoyo de la Fundación Alborés de Saúde Mental, que ha reforzado su programa de inserción laboral y mantenimiento laboral de las personas incluidas en este colectivo gracias a la ayuda prestada por la Fundación ‘la Caixa', que ha aportado 12.000 euros al proyecto. Son quince personas las beneficiarias de un proyecto de inclusión que se ejecuta en los centros que la asociación tiene en Monforte y en Chantada, aunque la entidad también desarrolla actividades de sensibilización en los once ayuntamientos limítrofes en los que opera.

El perfil de los usuarios es muy diverso, ya que se ayuda tanto a los que han pasado por una depresión o episodios de ansiedad como a las que tienen problemas de salud mental de mayor relevancia. Por eso la necesidad de una formación personalizada que se ajuste a las necesidades de cada uno de ellos. «Non todas as persoas necesitan as mesmas indicacións. Algúns só precisan recibir un asesoramento ou apoios puntuais e outros teñen que ter unha maior continuidade no tempo. Temos unha ampla gama de beneficiarios», explica Olalla García, la trabajadora social de la Fundación Alborés.

Reforzar la autoestima

Dentro de estas particularidades, a todos los alumnos se les refuerza un aspecto común: la autoestima. Para ello se incide en conseguir que sean eficaces en las tareas encomendadas. «A partir de sentirse eficaces en determinadas tarefas conseguen que a súa autoestima sexa maior e que se incremente tamén o control da súa vida e do seu entorno, o cal é moi importante para acadar a inclusión social», añade García.

La actividad de la fundación se fundamenta en cuatro pilares esenciales. El primero pasa por la formación y la adquisición de habilidades para la búsqueda y mantenimiento de un empleo. Una segunda acción pasa por la colaboración de los centros de formación reglada a los que también pueden acudir los alumnos, bien sea academias o institutos. Igual de importante es la colaboración con las empresas de la zona, con las que se opera estrechamente. Una cuarta iniciativa es la promoción de territorios responsables. O, lo que es lo mismo, el trabajo conjunto con los agente sociales, políticos y administrativos de la zona de influencia para perseverar en un objetivo común: aportar riqueza al territorio en el que actúan.

En todo este organigrama colaborativo es fundamental, según Olalla García, «o traballo en rede moi coordinado para lograr eses obxectivos comúns». Es, también, una forma para combatir el estigma social de las personas con problemas de salud mental.

La fórmula parece funcionar, porque el 25 % de las personas que participan en el programa consiguen un empleo. Puede parecer insuficiente, pero es una cifra bastante superior al 17 % de las personas de este colectivo que logran un trabajo a nivel general.