Estafan 170.000 euros a una granadina haciéndole creer que Brad Pitt se quería casar con ella

 La mujer, una granadina de mediana edad, creyó tocar con los dedos el sueño de casarse con el actor estadounidense Brad Pitt, pero en realidad estaba viviendo una pesadilla tejida por unos desalmados timadores. Es una de esas historias que, en un primer momento, causan pasmo e incredulidad. El propio abogado que representa a la víctima, Antonio Estella Aroza, admite que cuando le hablaron del caso pensó que era una broma. El falso Brad Pitt -que probablemente sean varios integrantes de un grupo de estafadores- convenció con engaños a la damnificada para que le transfiriera la friolera de 170.000 euros. «No es que sea millonaria ni mucho menos. Había recibido recientemente una herencia y por eso disponía de ese capital», explica el abogado.

El vaciado de la cuenta no se produjo de una tacada. Fue un proceso que tuvo lugar en 2022 y se prolongó a lo largo de unos cuatro o cinco meses. Y se gestó y consumó, cómo no, en las oscuras aguas de internet. El anzuelo fue una invitación que la mujer recibió en su correo electrónico para sumarse a un club de fans de Brad Pitt, uno de los actores más cotizados y deseados del séptimo arte. Parecía algo inofensivo.

Planes de boda

La perjudicada vive con su madre. No tiene hijos ni pareja. Así que el supuesto círculo de admiradores de Brad Pitt se convirtió en uno de sus entretenimientos. No hacía daño a nadie..., pero a ella sí se lo iban a hacer. Unos facinerosos, que se ocultaban tras una máscara con el rostro del artista norteamericano, estaban dispuestos a atacar su bolsillo y también su dignidad. «Llegó un momento en que le dijeron que si quería ser amiga de Brad Pitt y escribirse con él», recuerda el jurista. Todo era mentira, claro. Pero lo cierto es que ella comenzó a mantener correos con el ficticio Brad Pitt. En uno de ellos, los delincuentes le comunican que Brad Pitt va a rodar una película en España y que le gustaría contar con ella. «Le explicaron que sus rasgos físicos, de mujer de Andalucía, se adecuaban a la perfección a uno de los personajes del guion del largometraje», rememora Estella.

A todo esto, los timadores ya habían empezado a pedir a la víctima que les enviase ciertas cantidades de dinero. Las primeras peticiones eran relativamente modestas, cinco o seis mil euros. El récord fue una transferencia de 35.000 euros. Lo siguiente ya era la boda. Brad Pitt iba a visitarla con la intención de pedirle matrimonio. Pero el protagonista no apareció. Y el enamoramiento de su 'prometida' se transformó en depresión y frustración. Sabía que había sido víctima de un engaño de 170.000 euros.

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