
Hay activadas alertas a partir de esta tarde y las precipitaciones afectarán a toda la Península
22 oct 2023 . Actualizado a las 15:59 h.Entre hoy y mañana se vivirá una de esas típicas situaciones que ponen de manifiesto la importancia de los ríos atmosféricos, estructuras meteorológicas muy largas y estrechas que transportan humedad desde las regiones tropicales hacia las latitudes medias. Se llaman así por su parecido con un río y porque suelen transportar un caudal de agua equivalente al Misisipi.
Solo en Galicia los ríos más leves explican la mitad de la precipitación que cae durante el invierno. La humedad tropical se inyecta en los frentes y aumentan la cantidad de agua precipitable. Claro que también puede originar eventos de lluvia extremos. Basta con recordar el caso de la Navidad del 2022 cuando se produjo el trágico accidente de autobús en Cotobade. Durante la tarde del 24 de diciembre cayó muchísima lluvia en poco tiempo. Por momentos, la precipitación se presentó de manera torrencial y dejó de registros de 35 litros en 3 horas.
Antes de ese terrible siniestro, la sucesión de ríos de humedad tropical que habían estado llegando durante el último trimestre del año habían permitido a la comunidad gallega abandonar la grave situación de sequía. Otro ejemplo de la tremenda influencia que tienen.
Todo apunta a que en las próximas 36 horas llegará un frente con un enorme potencial para liberar lluvia tras haber absorbido humedad tropical a través de un río que conecta esta semana el Caribe con la Península.
En esta ocasión, además, el frente entrará un poco más al sur de lo habitual y permitirá que la lluvia sea intensa y generalizada también en Portugal y España y no únicamente en el noroeste. Es probable incluso que llegue hasta la nordeste de la Península, una de las zonas más castigadas por la sequía persistente. Una precipitación de octubre que será recibida como agua de mayo.
En Galicia hoy será una jornada de vientos intensos del suroeste que recuerdan que las borrascas son ahora las protagonistas. El sistema de bajas de presiones ya ha sido bautizado como Aline por la Agencia Estatal de Meteorología. Se trata de la primera borrasca nombrada en la temporada de ciclones extratropicales.
Habrá rachas superiores a 80 kilómetros por horas y olas de 4 a 5 metros. Por la tarde se esperan las lluvias del río atmosférico que dejarán registros de 40 litros por metro cuadrado en la provincia de Pontevedra, suroeste de A Coruña y en sur y la zona de montaña de Ourense.
Después, la novedad más importante llega de la mano del termómetro. Se va a formar un corredor de aire frío que se deslizará directamente de Islandia. Como consecuencia, las temperaturas, especialmente las máximas, descenderán por debajo de los 20 grados. Aunque lo importante realmente será que el viento soplará del noroeste. Esta circulación se encargará de generar una sensación térmica acorde con la época del año. El viernes incluso se espera un nuevo descenso de los valores diurnos. Lugo, por ejemplo, no superará los 14 grados.