El tiempo en Galicia: anomalía húmeda para empezar el 2024

SOCIEDAD

Vuelven los paraguas a Pontevedra
Vuelven los paraguas a Pontevedra CAPOTILLO

La primera semana del año vendrá marcada por el paso de varios frentes en la comunidad gallega

30 dic 2023 . Actualizado a las 14:33 h.

El 2023 termina con un tiempo cambiante. Durante la madrugada del sábado al domingo llegará un frente que dejará precipitaciones generalizadas. El resto de la jornada del 31 habrá chaparrones por la mañana que podrían caer en forma de nieve a partir de los 1.200 metros. Por la tarde ya no se esperan precipitaciones. La borrasca que afecta hoy a Galicia desde el oeste de Irlanda genera intenso mar de fondo y ha obligado a activar un aviso naranja en todo el litoral por olas que podrán superar los cinco metros de altura. 

La madrugada del 1 de enero puede llover, pero no mucho. Además, las precipitaciones se concentrarán únicamente en las provincias atlánticas. Tampoco será una noche gélida ya que los vientos del suroeste permitirán que los valores mínimos superen los 10 grados.

En la primera semana del 2024 está prevista una anomalía húmeda en el noroeste peninsular. Es decir, lluvias por encima de la media. Ya no queda nada del potente anticiclón de récord de hace unos días. Poco a poco empieza a perder peso y a partir del lunes estará situado al sur de la Península, dejando de proteger a la comunidad gallega.

La primera borrasca del 2024 llegará el día 2 de enero. Se espera que el frente que lleva asociado sea activo y dejará acumulaciones importantes en el oeste de la comunidad.

El siguiente frente llegará el día 4 y también está previsto que descargue bastante precipitación en las provincias atlánticas. A partir de entonces se habrá un escenario nuevo. El anticiclón sube ligeramente y junto con una borrasca localizada sobre el Reino Unido se va a crear un corredor de vientos del noroeste. De esta forma, la jornada del 5 de enero será también lluviosa, pero además hay que sumar la irrupción de aire frío de origen polar. Esto implicaría que algunas precipitaciones podrían caer como nieve en las zonas altas de la comunidad y quizás no tan elevadas. Veremos

Y a partir del 6 de enero, los modelos dibujan otro panorama interesante. Un nuevo centro de bajas presiones se va a situar en el Mediterráneo y el anticiclón remontará algo hacia el norte. Esto podría crear otro tipo de pasillo de aire frío, de origen siberiano. Aunque basta con que se muevan las piezas para que el corredor cambia la dirección del aire y venga del sur. En ese caso las temperaturas serían altas.

 

La predicción a medio plazo todavía presenta bastante incertidumbre y habrá que ir despejando las dudas con el avance de los días. En cualquier caso, parece que el 2024 empieza con la corriente en chorro creando grandes meandros y esto siempre favorece un tiempo cambiante y a menudo extremo, especialmente en el apartado de las temperaturas.