La cota de nieve descenderá este sábado hasta los 500 metros y podría acumular espesores de 20 centímetros. También hay un aviso amarillo en la costa norte de A Coruña y Lugo por rachas de viento superiores a los 80 kilómetros por hora
09 mar 2024 . Actualizado a las 11:39 h.A pesar de que la borrasca que afecta este fin de semana no ha sido bautizada, su impacto no está siendo precisamente menor. Ayer el frente que barrió la comunidad descargó precipitaciones intensas y las nevadas fueron copiosas en las montañas de Lugo y Ourense.
Hoy será una nueva jornada inestable. La presencia de aire frío en las capas altas de la atmósfera provocará chaparrones generalizado y puntualmente acompañados de granizo y aparato eléctrico. Además, seguirá nevando con fuerza en las zonas altas. La cota descenderá en algunos momentos hasta los 500 metros.
La Agencia Estatal de Meteorología ha activado un aviso naranja en la montaña lucense y ourensana por espesores de 20 centímetros. También hay un aviso amarillo en la costa norte de A Coruña y Lugo por rachas de viento superiores a los 80 kilómetros por hora. La proximidad del sistema de bajas presiones también provocará un temporal marítimo. Toda la costa gallega se encuentra este sábado con un aviso naranja por olas que estarán por encima de los cinco metros. Las temperaturas descenderán, las máximas y las mínimas.
Mañana continuará la influencia de la borrasca situada cerca de la costa de la comunidad. MeteoGalicia anuncia más chubascos que serán localmente tormentosos. La cota de nieve subirá progresivamente hasta terminar la jornada en torno a los 1.200 metros.
El lunes irrumpe brevemente el anticiclón. Habrá alguna lluvia débil, más probable en el oeste por la mañana. Las temperaturas no experimentarán cambios significativos. El viento soplará flojo del oeste con intervalos moderados en el litoral norte. El martes no se esperan lluvias.
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Tras varias semanas consecutivas con borrascas que han llegado una detrás de otra, muchos gallegos ya empiezan a preguntarse cúando dejará de llover, sobre todo con la Semana Santa en el horizonte.
De momento, no se aprecian grandes cambios en la dinámica meteorológica. El último calentamiento súbito de la estratosfera mantiene la configuración del revés, con las altas presiones reforzadas al norte de Escocia y las borrascas circulando algo más al sur de lo habitual.
Sin embargo, la atmósfera es un sistema que no tiene memoria y aunque últimamente parece que ha olvidado cómo despertar al anticiclón de las Azores, en cualquier momento puede cambiar radicalmente de comportamiento y empezar a propiciar un tiempo más estable y seco.