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Indemnizan a la familia de un hombre de 52 años que murió tras esperar casi dos horas a una ambulancia

Alfonso Torices COLPISA

SOCIEDAD

Los hijos hicieron hasta seis llamadas al 112 de la Región de Murcia para comunicar que su padre estaba cada vez más grave

12 feb 2025 . Actualizado a las 16:10 h.

El Tribunal Superior de Justicia de Murcia dictó la semana pasada una sentencia por la que ordena al Ejecutivo autonómico que indemnice con 73.925 euros más los intereses de demora a los hijos de un hombre que murió en septiembre del 2020 después de haber esperado durante casi dos horas en su domicilio, y en estado muy grave, la llegada de una ambulancia con el equipo sanitario de emergencia que debía atenderle. Los dos hijos del fallecido, representados por Ignacio Martínez, abogado de la asociación El defensor del paciente, han querido dar publicidad a la resolución judicial, según sus propias palabras, «para contribuir a que hechos tan vergonzosos no vuelvan a ocurrir».

La tragedia de esta familia comenzó en la mañana del 21 de septiembre del 2020, cuando su padre, de 52 años y vecino de Mazarrón, un hombre con varias patologías crónicas graves, como hepatopatía, EPOC, diabetes y obesidad, comenzó a encontrarse mal y a presentar «dificultad respiratoria». Así se lo comunicaron al servicio regional de emergencias 112 en una primera llamada, a las 12.31 horas, en la que le demandaban ayuda médica urgente. Entre ese momento y las 14.20 horas, que fue cuando llegó el equipo médico al domicilio del enfermo, los hijos realizaron otras cinco llamadas más al 112, cada vez más desesperadas, en las que comunicaban que el paciente «cada vez está peor y apenas respira», hasta que a las 14.02 horas ya informan al servicio de emergencias que la ambulancia sigue sin llegar y que su padre ya no tenía pulso ni respondía a los estímulos. Entre tanto, y fruto de su impotencia, realizaban dos llamadas desesperadas al centro de salud de Mazarrón, muy próximo a su casa, para que algún médico o ambulancia les socorriera, pero como única respuesta se les dijo que tenían que esperar a la asistencia sanitaria que vendría desde Cartagena.

Cuando el equipo médico llegó al domicilio, 110 minutos después del primer aviso al 112, encontró al enfermo en parada cardiorrespiratoria, de la que inicialmente logró sacarlo, pero que no evitó que finalmente muriera en la uci del Hospital General Universitario Santa Lucía de Cartagena sobre las 17.34 horas del mismo día, cuatro horas y diez minutos después de la primera llamada familiar de auxilio.

Según recoge la propia sentencia, el informe de la Inspección de Servicios Sanitarios de la comunidad autónoma admite que hubo un error inicial en la asignación del tipo de ambulancia (una convencional en vez de una uci móvil) y que «el tiempo transcurrido entre la llamada inicial y el inicio de la asistencia a domicilio (110 minutos) supera en demasía los estándares de calidad de intervalos de tiempo considerados pertinentes y óptimos entre demanda de asistencia y ejecución de la misma».

Los cálculos del letrado de la acusación indican que la administración sanitaria murciana deberá pagar a esta familia unos 78.000 euros, que son los correspondientes a los 73.925 de la indemnización judicial más los intereses de demora desde que los hijos interpusieron la reclamación patrimonial por las deficiencias en la atención a su padre hace ahora algo más de cuatro años, en diciembre del 2020.