El cambio climático reduciría el hábitat del castaño

La Voz REDACCIÓN

SOCIEDAD

Castiñeiro con castañas en la Costa da Morte.
Castiñeiro con castañas en la Costa da Morte. ANA GARCIA

Un nuevo estudio anticipa una reducción de su hábitat idóneo y destaca la necesidad de promover su sostenibilidad a largo plazo

28 feb 2025 . Actualizado a las 11:12 h.

Una investigación de la Universidad de Oviedo, el Instituto Mixto de Investigación en Biodiversidad de Asturias, la Universidad de Granada y la Fundación Oso Pardo anticipa una reducción del hábitat del castaño europeo en la península ibérica debido al cambio climático. El estudio aboga por impulsar estrategias de conservación debido a su relevancia en los ecosistemas y economías rurales.

La publicación de la revista Frontiers in Forests and Global Change, evalúa el futuro de la especie en la Península Ibérica ante diferentes escenarios climáticos hasta el año 2100 y anticipa una reducción de su hábitat idóneo, en las regiones atlánticas —como Galicia—, pero sobre todo en las mediterráneas, según ha informado este jueves en un comunicado la Universidad de Oviedo. El declive del castaño podría generar cambios en la composición de los bosques y en la disponibilidad de hábitats para diversas especies, lo que afectaría tanto a la flora como a la fauna dependiente de estos ecosistemas, según los investigadores.

Árboles con hojas finas y raíces poderosas

Otra publicación de principios de febrero confirmó que el futuro de los bosques españoles podría estar dominado por los árboles con hojas finas y raíces poderosas. La colaboración entre el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF) y la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) indicaba que la situación de cambio climático en la que se encuentra España podría favorecer a especies cuyas características les permitiesen tener acceso a recursos, como el agua o la luz solar, con mayor facilidad.

En las zonas húmedas y más frías de la península, como la comunidad gallega, el estudio apuntaba a que ganarían terreno ejemplares como el haya, el fresno o el roble, debido a que sus hojas finas les permiten producirlas sin consumir tantos recursos y captar mayor cantidad de luz solar para realizar la fotosíntesis debido a la amplia superficie de las mismas.

Necesidad de preservar la especie

Por estos motivos, los autores del estudio destacan la necesidad de poner en marcha estrategias activas de mitigación del impacto con el objetivo de conservar la especie y promover su sostenibilidad a largo plazo para preservar su relevante papel en los ecosistemas ibéricos y su biodiversidad, así como en la economía rural de muchas zonas de España.

Entre las principales medidas recomendadas por sus autores, se encuentran la selección genética de variedades más resistentes a la sequía y a temperaturas extremas, el manejo eficiente del agua en plantaciones agroforestales, y la restauración de ecosistemas forestales degradados.