El feminismo gallego sale a la calle: «Imos desertar das tarefas do fogar»
SOCIEDAD
Las ciudades y villas gallegas acogen a esta hora marchas reivindicativas por el 8M, en muchos casos divididas, como ha ocurrido en Madrid un año más, con dos manifestaciones diferentes
08 mar 2025 . Actualizado a las 23:52 h.Galicia y España se echan hoy la calle para celebrar y reivindicar el 8M, con convocatorias en numerosas ciudades y en algunos casos, con dos manifestaciones diferenciadas, como en el caso de Madrid, que por la mañana acogió la convocada por la Comisión 8M y que desde las 18 horas celebra la convocada por el Movimiento Feminista de Madrid, que defiende la abolición de la prostitución y rechaza la ley Trans, que la Comisión 8M sí aprueba.
Bajo el lema «o feminismo move a historia, sen loita non hai futuro», partió a media tarde la primera gran marea morada desde la plaza de España. La manifestación organizada por Resposta Feminista fue la más secundada de las que se organizaron en Vigo, informa A. Pascual. Mujeres de jóvenes a ancianas clamaron por «más recursos y menos discursos» y recordaron durante la marcha que ninguna mujer debe sentirse sola porque «ten o feminismo».
Como lleva ocurriendo desde hace varios años, el 8M se convocó en Vigo con dos concentraciones distintas por la falta de consenso que existe entre organizaciones feministas en cuanto a la ley trans y la forma de abordar la prostitución. Unas 16.000 personas, según los datos de la Policía Local, secundaron el Día de la Mujer en la mayor ciudad de Galicia para demostrar una vez más que el feminismo es la herramienta para quebrar, de una vez por todas, las discriminaciones de género. En esta ciudad, el debate se establece entre Resposta Feminista y As Furias. Las últimas marcharon bajo el lema «artellando a abolición do patriarcado». Partieron a las 20 horas, también de la plaza de España y concluyeron en Porta do Sol, donde expresaron su orgullo porque «por primeira vez en moito tempo as feministas abolicionistas conformamos a manifestación oficial nesta cidade». Declinaron que la de ayer fuese una jornada «de celebración» al considerarla «unha folga, un recordatorio da loita constante á que as obreiras nos enfrentamos no pasado e no presente».
La marcha del 8M congregó a varios miles de personas en A Coruña, informa C. Portolés. No obstante, el mal tiempo hizo que, según algunos manifestantes, hubiera «menos gente que otros años». A pesar de la lluvia, un río morado de gente recorrió a pie la distancia entre el Obelisco y la Praza das Cigarreiras, punto donde se desplegó un escenario desde el que se leyó el manifiesto de la cita. Un documento que reivindicaba, entre otras cosas, el «acceso a la universidad y a una vivienda digna» y «un sistema público de cuidados que atienda en todas las etapas de la vida».
Se vieron tanto mujeres como hombres de todas las edades, caminando codo con codo y coreando eslóganes reivindicativos como «contra a violencia machista, revolta feminista» o «machista, escoita, estamos en loita». La jornada se desarrolló de forma completamente pacífica y sin incidentes. «Fue una ocasión que muchas aprovecharon para subrayar principios y convicciones que creen más importantes que nunca. Las mujeres tenemos que reivindicarnos en estos tiempos en los que estamos. No podemos volver atrás en todo lo conquistado», comenta una de las manifestantes.
Cuatro mil personas, según fuentes policiales, secundaron en Santiago la manifestación de la Marcha Mundial das Mulleres y el Bloque Abolicionista hasta Praterías. Aunque a ellas hay que sumar un grupo reducido (en comparación con el anterior) que tomó otro camino. La llamada Batukada transfeminista no hizo el recorrido completo, sino que acabó en la Alameda, reivindicando el derecho del retorno del pueblo palestino, tras romperse «un acordo do movemento feminista da cidade», entre otras discrepancias.
Además, por la mañana hubo otra marcha liderada por la CIG, la cual estuvo igualmente presente por la tarde. Aunque la lluvia acompañó buena parte del recorrido, apenas hubo bajas entre una marea morada que recordó que «por moito que se molle, a nosa loita non se encolle», informa P. Calveiro.
Pese a la alerta meteorológica y la amenaza de lluvia y viento, el feminismo se hizo notar este 8M por las calles de Pontevedra, informa López Penide. Varios cientos de personas de distintas generaciones se movilizaron en una marcha que encabezaba una pancarta en la que se podía leer: «Contra o fascismo, o precariedade e o capital. Feminismo para avanzar!».
Al grito de «patriarcado e capital, alianza criminal», «imos desertar das tarefas do fogar» o «menos discursos e máis recursos», la movilización atravesó el casco urbano dejando claro que «é feminista a loita de clases» hasta desembocar en la plaza de España. En este punto neurálgico de Pontevedra, y bajo un fuerte aguacero, se leyó un manifiesto denunciando «as inxustizas que as mulleres e as persoas diversas seguimos a sufrir no eido laboral, social e político».
En este 8M las mujeres de Lugo salieron a la calle para reivindicar entre gritos, una vez más, su papel en la sociedad. Miles de personas participaron en las manifestaciones y actos convocados por toda la provincia, siendo la mayoritaria la que arrancó frente a la sede de la Xunta, al pie de la Ronda da Muralla, a las 20 horas, convocada por la Plataforma Feminista. La marea comandada por las mujeres de Lugo recorrió parte del centro de la ciudad hasta la Praza de Santa María. En esta plaza alzaron la voz María Barba Núñez, presidenta de Aliad Ultreia; Pilar Sánchez Monje, trabajadora de la Rede Museística de Lugo y del museo del Pazo de Tor, e Isabel Vilalba Seivane, ganadera y secretaria xeral del Sindicato Labrego Galego.
Las calles de la ciudad de Ourense acogieron por la tarde dos concentraciones. La primera de ellas fue organizada por el colectivo Arrolos de Teta —por la lactancia materna y contra la violencia obstétrica—. Salieron a las calles portando una teta gigante para mostrar su poderío. Un poco más tarde tomaba el relevo la Marcha Mundial das Mulleres, con la concentración más multitudinaria de todas las convocadas en la provincia. Partió de la Subdelegación del Gobierno para concluir, como es habitual, en la Praza Maior.
Apesar del gran frío, una gran movilización tomó Ferrol esta noche por el 8M para evitar un retroceso en los derechos de las mujeres. En el aire se respiraba la alianza de madres, hijas, hermanas y amigas. Y la lucha de miles de mujeres en la historia de esta ciudad, desde las que construyeron el Dique de la Campana hasta las guerreras del Baxi. «Ni un paso atrás», coreaban los participantes ante una panorama internacional de recortes dirigidos a esta población
A las 18.15 horas arrancaba la segunda manifestación convocada en Madrid al grito de «Ni cis ni trans, mujer nada más».
La mayoría de las marchas en la comunidad gallega estaban previstas para la tarde, pero a lo largo de la mañana hubo ya varios actos, como la concentración del bloque abolicionista en Vigo. Decenas de mujeres se han concentrado a mediodía para manifestarse contra todas las formas de explotación de las mujeres, desde la violencia sexual a la reproductiva, y para proclamar que «sin abolición no hay liberación».
Tras corear consignas como «ninguna mujer nace para puta», «mi cuerpo no se vende, mi cuerpo no se alquila», o «la pornografía es cultura de la violación», varias representantes de asociaciones han leído un manifiesto en el que han trasladado su deseo, en este 8 de marzo, Día de la Mujer, de «alzar la voz contra todas las formas de opresión y violencia que sufren millones de mujeres y niñas en todo el mundo».
Han denunciado que la prostitución, la pornografía y otras formas de mercantilización del cuerpo femenino, como los vientres de alquiler, «perpetúan» la violencia contra las mujeres y su explotación. «El feminismo abolicionista defiende que nuestros cuerpos no son mercancía», han señalado.
Las convocantes, bajo el lema «Mujeres en lucha contra el machismo global» han empezado a marchar desde la Plaza de Cibeles entre cánticos de «mi vientre y mi vagina, ni se compra ni se alquila». Además, las feministas han llevado pancartas en apoyo a Gisèle Pelicot, la mujer francesa víctima de las violaciones organizadas por su propio marido. Una de estas, de gran tamaño con la figura de ella.
A la manifestación del Movimiento Feminista de Madrid ha acudido la ministra de Igualdad, Ana Redondo, pero sin otros ministros socialistas que sí han acudido a la marcha de la Comisión 8M que se celebró por la mañana, y una delegación de diputados y senadores del Partido Popular, encabezados por la vicesecretaria de Igualdad, Conciliación y Política Social del PP, Ana Alós.
El Movimiento Feminista de Madrid quiere «levantar la voz contra la extrema derecha que niega la violencia machista y perpetúa estructuras profundamente misóginas» así como contra la izquierda «cómplice del sexismo poniendo como excusa la interculturalidad».
Antes de comenzar la manifestación, las portavoces del Movimiento Feminista de Madrid, Jana Bravo y Carmen Flores han pedido a la ministra de Igualdad, Ana Redondo, que lleve a cabo su agenda feminista.
También en Barcelona se han convocado por primera vez dos marchas diferenciadas. La movilización ha arrancado en el centro de Barcelona con la participación de varios miles de personas en las dos manifestaciones convocadas: una unitaria y otra alternativa de abolicionista y discrepante con la autodeterminación trans.
Además, miles de personas se manifiestan desde las seis de esta tarde en Bilbao bajo el lema «Ante el fascismo, osadía feminista», convocadas por el movimiento feminista Bilbo Feminista Saretzen.
En Madrid, igual que otras capitales del país, el movimiento feminista sale a la calle dividido en dos manifestaciones por cuarto año consecutivo, tras la brecha abierta por el debate sobre las personas trans o las diferencias sobre cómo abordar la prostitución. Este año, además, las acusaciones relacionadas con prostitución contra el exministro socialista José Luis Ábalos y las denuncias por violencia sexual contra el exdiputado de Sumar Íñigo Errejón y el político de Unidas Podemos Juan Carlos Monedero, han supuesto un terremoto para la izquierda y un recordatorio de que la violencia contra las mujeres es estructural.
En la marcha que este mediodía recorrió las calles de Madrid, las miles de convocantes han desafiado a la lluvia ataviadas con chubasqueros y paraguas, muchos de color morado y arcoíris. A esta manifestación han acudido representantes políticos del PSOE, Podemos y Sumar, entre ellos varios ministros como la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz y la ministra de Igualdad, Ana Redondo, quien ha llamado a la «unidad» del feminismo. Redondo ha recordado que a las feministas «hay más cosas que nos unen que nos separan».
Igualmente, a esta misma marcha ha asistido la ministra de Infancia y Juventud, Sira Rego; la ministra de Sanidad, Mónica García, así como la exministra de Igualdad Irene Montero y la secretaria general de Podemos, Ione Belarra. No hubo representantes del PP, que sí tienen previsto acudir a la marcha de esta tarde.
Peor suerte han sufrido las marchas organizadas en Andalucía donde, tras las advertencias del 112 y de la Aemet por las previsiones de lluvia durante la jornada de este sábado, han sido suspendidas las manifestaciones feministas en las ciudades de Málaga, Cádiz y Huelva.
En concreto, la movilización feminista de Málaga, que estaba convocada para las 12 horas, ha sido cancelada por la adversidad meteorológica, por lo que las diferentes plataformas y asociaciones organizadoras han acordado llevar a cabo esta concentración la semana próxima si no hay riesgo de lluvia.
Por otro lado, las manifestaciones de Huelva (convocada a las 12) y de Cádiz (a las 11.30 horas) también se han suspendido por los avisos de intensas lluvias. En este caso, sus organizaciones correspondientes aún barajan la posibilidad de aplazarlas para otra fecha próxima.
En el resto de Andalucía se están llevando a cabo las manifestaciones previstas con marchas unitarias convocadas por los colectivos feministas en todas las provincias de la comunidad, a excepción de Sevilla, y Almería, donde hay más de una convocatoria de diferentes organizaciones.
En Castilla y León, el Movimiento Feminista de Ávila también ha suspendido la concentración prevista ante la previsión de nevadas, viento y lluvias en la provincia, por lo que todos los actos y reivindicaciones han quedado aplazados a otra fecha que se comunicará próximamente. En el resto de la comunidad, gran parte de las marchas están previstas para esta tarde, con protestas divididas en León y Valladolid.
Cantabria ha conmemorado este sábado el Día Internacional de la Mujer con una manifestación en Santander como acto central, al igual que el movimiento feminista asturiano, que se ha unido este sábado en una multitudinaria y unitaria manifestación que ha recorrido las calles de Gijón con el lema «Avanzamos imparables. Resistimos dando tira» que ha aglutinado al colectivo de mujeres con diversidad funcional, mujeres rurales, migrantes, gitanas, abolicionistas de la prostitución, LBTIQ+ o pensionistas.
En Navarra, miles de personas —alrededor de 6.000 según la Delegación del Gobierno— han respaldado este sábado la manifestación convocada por el movimiento feminista, con motivo del 8M, en la que se ha llamado a las «alianzas feministas» ante la «reacción fascista» en contra del avance en los derechos de las mujeres.
En Extremadura, entre carteles que advierten de que «el machismo mata» y gritos de «aquí estamos las feministas», cientos de personas, mujeres en su mayoría, han recorrido este sábado las calles de Mérida y Badajoz para reivindicar una igualdad real y efectiva frente a las múltiples discriminaciones, formas de violencia y «retrocesos» que, aseguran, «se vienen constatando mundialmente».
Las manifestantes han exigido que la agenda feminista «vuelva a ocupar el primer plano» de la acción de los gobiernos, así como han abogado por una justicia feminista y un poder judicial que «trate bien a las mujeres», «no sospeche de ellas» y no «beneficie a los violadores».
También ha arrancado ya la manifestación de Valencia. Silvana Cabrera, portavoz de la Assemblea Feminista y Regularización Ya, ha destacado que buscan «cambiar el paradigma sobre el cual se construye el género, el racismo y la clase». «Más aún, después de haber sufrido una catástrofe sin precedentes como ha sido la dana», ha resaltado.
En este sentido, ha lamentado que, aún cuatro meses después de las inundaciones, «sigue habiendo todavía muchísimas necesidades básicas, sobre todo para las mujeres y para las personas que se encuentran en situación administrativa irregular». Entre las personas que más afectadas se han visto por la dana, están las trabajadoras del hogar internas que «han perdido sus trabajos y han sido echadas a la calle sin ningún tipo de indemnización».
António Guterres: «No podemos tolerar un mundo donde las mujeres y las niñas vivan con miedo»
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha abogado por un mundo donde las mujeres nunca vivan con miedo en su discurso de conmemoración del 8M. «No podemos tolerar un mundo donde las mujeres y las niñas vivan con miedo, donde su seguridad sea un privilegio en lugar de un derecho no negociable. Cuando las mujeres y las niñas avanzan, todos prosperan», ha declarado el secretario general.
Guterres ha recordado que este año se cumple el trigésimo aniversario de la histórica conferencia de Pekín, que reafirmó que los derechos de las mujeres son derechos humanos. Desde entonces, ha añadido Guterres, «las mujeres han levantado barreras, roto techos y remodelado nuestras sociedades» y «hay más niñas en la escuela, y más mujeres en puestos de poder».
No obstante, el secretario general de la ONU ha recordado los extraordinarios desafíos que quedan por resolver: «Harán falta 130 años», ha estimado, «para acabar con la pobreza extrema entre las mujeres y las niñas». Además, Guterres ha denunciado las múltiples amenazas que todavía se ciernen sobre las mujeres en un mundo donde «cada diez minutos, una mujer es asesinada por su pareja o un miembro de su familia» y «unos 612 millones de mujeres y niñas viven bajo la amenaza de conflictos armados que sacrifican sus derechos con demasiada frecuencia».