Fumata negra con suspense para abrir el cónclave: el resultado de la primera votación se hizo esperar
SOCIEDAD

Hasta las nueve de la noche no salió humo negro de la chimenea de San Pedro, lo esperado en un primer escrutinio que suele ser de tanteo; el cónclave continuará este jueves en una jornada en la que puede haber hasta cuatro votaciones
08 may 2025 . Actualizado a las 09:32 h.Miércoles. Nueve de la noche en Roma. Ante los ojos de las 50.000 personas que abarrotaban la plaza de San Pedro, un humo negro salió por fin de la chimenea en el techo de la Capilla Sixtina, donde se habían reunido los cardenales en el tercer cónclave del siglo XXI, la cita para elegir al sucesor de Francisco. Era lo previsto, pero el resultado se hizo esperar más de lo aguardado.
El arzobispo emérito de Palermo, Paolo Romeo, un cardenal con gran experiencia, aunque no elector al tener 87 años, está seguro de que el nuevo papa será elegido «en cinco o seis votaciones», por lo que «no será un cónclave largo». Romeo no es el único que piensa así. En los últimos días, al margen de las Congregaciones, varios cardenales declararon a los medios que el cónclave durará un par de días, como ya ocurrió con Benedicto XVI y Francisco. En cualquier caso, nada excluye que los fieles tengan que esperar más tiempo para conocer el nombre del nuevo pontífice .
El primer día del cónclave comenzó en la mañana del miércoles en la basílica de San Pedro con la misa pro eligendo pontifice, presidida por el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re. Durante la misa, a la que asistieron cinco mil personas, Re pidió oraciones para que «Dios conceda a la Iglesia el papa que mejor sepa despertar las conciencias de todos y las fuerzas morales y espirituales en la sociedad actual, caracterizada por un gran progreso tecnológico, pero que tiende a olvidarse de Dios», y recordó que «los cardenales electores se preparan a un acto de máxima responsabilidad humana y eclesial, ya una decisión de gran importancia; un acto humano por el cual se debe abandonar cualquier consideración personal, y tener en la mente y en el corazón solo al Dios de Jesucristo y el bien de la Iglesia y de la humanidad». Hay mucha emoción entre los cardenales: un ejemplo de ello es el vídeo que el chileno Chomalí subió a Instagram, en el que se le ve empeñado en lavar cuidadosamente la camisa blanca que llevaría en el cónclave para que quedara «impecable».
La misa terminó poco antes de las once y media y, poco después de las cuatro, los 133 cardenales electores de 71 países distintos se reunieron en la Capilla Paulina del Palacio Apostólico. Re no participará en el cónclave por razones de edad, por lo que este será presidido por el cardenal Parolin, secretario de Estado de Francisco y gran favorito según los expertos en asuntos vaticanos. De hecho, el momento de la misa de la mañana en el que cogió a Parolin por los brazos y le dijo «los mejores deseos... y dobles» tuvo mucha resonancia en los medios italianos.
Sobre las 16.30, comenzó la procesión de los cardenales hacia la Capilla Sixtina, que alberga los espléndidos frescos de Miguel Ángel. El último en entrar en la Capilla Sixtina fue el propio Parolin, acompañado por el maestro de las celebraciones litúrgicas papales, Diego Ravelli.
Una vez en la Capilla Sixtina, los cardenales entonaron el antiguo himno Veni Creator Spiritus para invocar el descenso del Espíritu Santo, y se pronunció el juramento de fidelidad y secreto, en latín. A las 17.45 monseñor Ravelli pronunció el «extra omnes», que en latín significa «todos fuera», y aquellos que no eran cardenales electores tuvieron que salir y dejar las puertas cerradas tras de sí. Este jueves los purpurados volverán a su encierro.