Los más jóvenes desprecian el riesgo y ya vapean el doble de lo que fuman
SOCIEDAD
Tres de cada cuatro españoles apoyan la prohibición del tabaco en las terrazas
27 may 2025 . Actualizado a las 09:15 h.Para los médicos de familia, que presentaron ayer su encuesta anual sobre tabaquismo «lo más llamativo es la permisividad que muestran los más jóvenes en cuanto a la restricción de los espacios sin humo». Además, los datos confirman como los vapeadores han colonizado los grupos de menor edad hasta el punto de que los adolescentes, que ni siquiera podrían comprar estos dispositivos legalmente, ya vapean prácticamente el doble de lo que fuman cigarrillos convencionales.
La encuesta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SemFYC), realizada a partir de 9.500 entrevistas, incide de manera especial en la extensión de los espacios vetados al tabaco. Y precisamente en ese campo es donde más se ve el «cara y cruz» de los resultados. En conjunto, el 74 % de los españoles están a favor de que se prohíba fumar en las terrazas. Sin embargo, en el grupo de menor edad (14-18) el apoyo a esta media cae al 56 %. Unas diferencias que para los expertos del grupo de abordaje del tabaquismo de la SemFYC evidencian una «posible correlación entre este salto generacional y la expansión de nuevas formas de consumo, como los vapeadores y el tabaco calentado, entre los más jóvenes.
Ese rechazo al humo sube hasta el 83,7 % cuando se habla del entorno de los centros educativos y ahí sí que los adolescentes están incluso ligeramente por encima de la media (84,7 %). En las paradas de autobús respaldan la prohibición el 76,8 % de los encuestados. En los lugares públicos abiertos el 65 % y en las playas el 62,7 %. Incluso hay una mayoría, aunque exigua (53,2 %), a favor de eliminar el tabaco de los vehículos particulares.
En este campo, más que las cifras en sí, lo alentador para los médicos que tratan de luchar contra el consumo es la tendencia, porque la sensibilización está al alza en todos los casos. Por ejemplo, la idea de prohibir fumar en las playas —algo que en Galicia ya ocurre en 242 arenales— en la encuesta del año pasado tenía una aprobación del 53,4 % y ahora ese respaldo está casi diez puntos por encima.
El verdadero drama para los sanitarios, sobre todo porque significa dar pasos atrás en una reducción del consumo que se venía consolidando desde hace decenios, es la proliferación de los cigarrillos electrónicos entre los más pequeños, porque «son la vía de entrada al tabaquismo para los menores de entre 14 y 18 años, cuanto tienen prohibido adquirir estos productos». En esa franja de edad vapean el 11,1 % de los encuestados, es decir nueve veces más que entre la población en general, en la que solo el 1,2 % hace uso de los vapeadores. Además, en la encuesta del 2024 eran solo el 6,6 % de los chavales los que admitían estos consumos, lo que da una idea de lo rápida que está siendo la evolución. Tanto que ese 11,1 % prácticamente doble el porcentaje de los que fuman cigarrillos convencionales.
El trabajo publicado por los médicos de primaria también echa por tierra uno de los argumentos con los que la industria y un puñado de profesionales sanitarios defienden a los vapeadores, que es el de la supuesta reducción de daños. «El 93 % de los que vapean consumen, además, cigarrillos tradicionales. Esto demuestra que no se están usando para dejar de fumar ni reducir el riesgo sino para atrapar a los jóvenes en la adición a la nicotina».
Fumadores apoyan subir precios
Dentro de las medidas defendidas por los profesionales para seguir avanzando en el combate de la nicotina destaca la subida de precios. De hecho, la propia SemFYC pide «responsabilidad» a Sanidad y Hacienda para poner a España «al nivel de compromiso de Europa», donde el tabaco tiene entre el 80 y el 90 % de impuestos frente al 51 % de España. A nivel social, hay un 74,6 % de personas que están a favor de esa subida de precios y llama la atención que entre los propios fumadores casi la mitad, (el 48,4%) también apoyan la medida.