
En época de exámenes, una universidad nigeriana revisa a sus estudiantes mujeres antes de entrar para que cumplan un código de vestimenta
20 jun 2025 . Actualizado a las 20:04 h.Esta semana de calor y exámenes se ha impuesto una nueva regla en una universidad de Nigeria. Si las chicas no llevan sostén, no entran. Un vídeo, hecho con un móvil a cierta distancia, captó el momento en el que las estudiantes hacían fila para poder pasar a la Universidad Olabisi Onabanjo, mientras unas mujeres se cercioraban de que usaban sujetadores y les entregaban unas hojas con el nuevo código de vestimenta. Contra la lujuria, justo el día que empezaban las últimas pruebas antes de las vacaciones de verano.
La norma de 'no bra-no exam', como ha sido bautizada, especifica que ningún estudiante puede mostrar partes sensibles de su cuerpo, como pechos, pezones, nalgas ni ombligos. La ropa no puede ser ni muy fina, ni transparente ni corta. Tiene que cubrir toda desnudez y no puede destacar partes del cuerpo. Está prohibido cualquier vestido «capaz de hacer que personas del mismo sexo o del sexo opuesto deseen al estudiante de manera indecente».
Además no se pueden usar ciertos colores, como los que tengan connotación política, o ropa con dibujos que atenten contra la moral. Hay margen también para la discreción: se reprueba todo lo que puede resultar «ofensivo para el sentido ideal o natural».
Polémica viral
Sin comentarios por parte de las afectadas directas ni de las autoridades, hay defensores en la comunidad universitaria. «No es una política nueva», indica Mujeeb Alani Ojuko, un «dinámico líder estudiantil», según se describe a sí mismo. «El código de vestimenta busca mantener un ambiente respetuoso y libre de distracciones, animando a los estudiantes a vestir con modestia y de acuerdo con los valores de la institución».
Ante la polémica, que se hizo viral y saltó a medios como la BBC o CNN, la Universidad Olabisi Onabanjo, ubicada en el estado de Ogun, reconoció a medios locales que necesitaban aplicar su política moral de una manera menos agresiva, para acallar las voces críticas que lo equiparan a una agresión sexual. Pública y fundada en 1982, la universidad no tiene raíces religiosas pero no parece que se disponga a enmendar su estricta política de vestir, que considera un «valor de la institución». A pesar de ser calificada como «sexista» o «acoso», y empiecen los amagos de demandas, el lema 'sin sostén, ni exámenes ni estudios' parece que perdurará, aunque con métodos menos burdos e irrespetuosos.