Jordi Hurtado: «Tenía que bajar intensidad y trabajar de otra forma, pero no quiero dejarlo»

J. MORENO MADRID / COLPISA

SOCIEDAD

Sergio Pérez | EFE

El presentador cede el «Saber y ganar» de fin de semana a Rodrigo Vázquez

29 jun 2025 . Actualizado a las 17:45 h.

Cuatro décadas en RTVE, de las cuales 28 años han sido al pie del cañón en Saber y ganar. El presentador Jordi Hurtado (Sant Feliu de Llobregat, Barcelona, 67 años) es historia de la televisión. El concurso que presenta cada tarde en La 2 iniciará la nueva temporada de septiembre con un plató renovado y una nueva cara para los fines de semana: la de Rodrigo Vázquez, que salta de El cazador al mítico programa de TVE en las sobremesas del sábado y domingo. «Lo tiene todo. Es alguien que sabe comunicar y dominar el género del concurso. Hay que vibrar con el concurso y tener ganas, y tú las tienes», alabó Hurtado sobre el que será su relevo. 

—Deja el fin de semana de «Saber y ganar» en manos de Rodrigo Vázquez.

—Esto va a ser fantástico, ya vamos a poner la agenda a tope [risas]. La familia también me pedía que bajara un poco la intensidad. Es que empiezas a contar y son 28 años de Saber y ganar. Grabamos todas las semanas y paramos un poquito en Navidad, Semana Santa y agosto. Son grabaciones de mañana y tarde, 45 minutos por programa, pero siempre estamos haciendo especiales con los concursantes o un evento especial. El 1 de septiembre haremos el primer programa con el nuevo decorado, que lo grabaremos en julio cuando lo tengamos montado. Vendrán concursantes magníficos e históricos, que el espectador además los conoce muy bien. Esa es una de las grandezas de Saber y ganar; hay esa familiaridad con los concursantes. 

—¿Cuál es el éxito del casting del programa?

—Ese es el éxito de Marisa, que es normalmente la que lleva el casting de concursantes. Cuando encontró a Ángel Chacón de Almería, que ha estado 100 programas, hacía la calculadora en 15 segundos y respondía a todo tipo de preguntas, pues claro, yo la felicité.

—¿Qué ha aprendido en este concurso?

—Aprendes, claro, porque trabajas con conocimientos, trabajas con cultura. Primero que todos los fines de semana nos envían todos los guiones, todas las preguntas, lo que es la estructura de los programas de la semana siguiente, y me dedicaba a estudiar en el ordenador.

—¿Se atrevería a concursar?

—No, yo quiero estar siempre en el otro lado, la verdad. Desde que presento este programa ya no he jugado al trivial, porque sería repelente (risas). Ya hace 25 años que no juego.

—¿Cuándo decidió rebajar la carga de trabajo?

—Pues ha pasado una cosa: que pasan los años, entonces cuando uno mira el calendario y ve que este programa lo empezó hace 28 años siendo joven, entonces, aunque estés muy bien, llega un día en el que notas que hay que bajar intensidad. De bajar horas e ir trabajando de otra forma. Es simplemente eso. Yo disfruto tanto este programa, me encanta lo que hago y no quiero dejarlo, por lo que promoví la opción de dejar el fin de semana. En la dirección de TVE y la productora lo entendieron perfectamente.

—¿Cómo recuerda el primer día en «Saber y ganar»?

—El primer día fue lleno de ilusión por volver a trabajar con Sergi Schaaff, con todo ese equipo. Y yo pensaba: estoy entrando en un transatlántico. Primero firmamos por tres meses, a ver cómo funcionaba el concurso, porque era un producto nuevo y creado por Sergi, no una adaptación de otro país como Pasapalabra. Pasó ese tiempo y aquí seguimos tres décadas después.

—En este tiempo también ha habido ‘separaciones', como la jubilación de Juan Cardenal.

—Fue una separación que me dolía. Nos decían que éramos una extraña pareja. Nos hemos peleado en 25 años, nos decíamos lo que nos daba la gana. Ahora con Elisenda Roa hago lo mismo. Jugamos con los contenidos de los programas o las reacciones de lo que pasa, de cualquier cosa. Él por edad se tuvo que jubilar y la empresa le dijo que se tenía que jubilar y ya está, pero ahí estamos, todos los compañeros seguimos con muchas ganas.

—¿Se plantea el horizonte de la jubilación?

—No me la planteo. Ahora a disfrutar de los fines de semanas.

—En estos 40 años en TVE, si volviera para atrás, ¿lo viviría igual?

—Es que esto no lo sabes. Creo que he sido muy privilegiado y me siento muy afortunado de trabajar en un proyecto que me gusta, que me encanta, que me ha ilusionado, que he estado 25 años al lado de Sergi, que era un máquina y una bestia televisiva. He sido un privilegiado de estar a su lado, entonces no tenía esa necesidad de marchar de ahí. Y si esto ha funcionado tan bien, solo puedes estar agradecido. Es una suerte. Yo lamento cuando hay jóvenes en precario, se les hace un contrato de un año y después se tienen que buscar la vida. Quiero que tengan continuidad como afortunadamente he tenido en RTVE sin estar en plantilla.

—¿Tiene plan para vacaciones?

—Desconectar un poquito y ya está. Sobre todo respirar mucho, caminar mucho, moverte, porque como nos pasamos tantas horas que no nos toca el sol ni el aire.