Cristina Lasvignes: «Escuchar al otro sin tener que darle tu opinión es esencial»
SOCIEDAD

La periodista vuelve a la televisión con el talk show «El diario de verano»
20 ago 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La periodista Cristina Lasvignes (Madrid, 1987) regresó a la televisión para sustituir a Jorge Javier Vázquez en El diario de verano, el talk show que emite Telecinco cada tarde a las 18.30 horas. Anteriormente, su voz había sido una presencia constante en el programa de radio Hablar por hablar y en Las mañanas de Kiss FM. En la pequeña pantalla condujo los magacines vespertinos Tal cual lo contamos y Esto es vida.
Tras su paso por la cadena pública, dejó la primera línea de la televisión para centrarse en su faceta empresarial y en su colaboración con la Fundación Cris contra el cáncer, apoyando iniciativas de investigación y dirigiendo espacios documentales.
—¿Qué consejos le dio Jorge Javier?
—Que memorice bien los nombres, porque es habitual equivocarse. También las puertas del plató. Parece muy sencillo, pero es como: «¿Por dónde pueden salir los invitados?». Unos por la izquierda, otros por la derecha. Los otros consejos son para mí; nos los quedamos para los dos.
—¿Pasó un casting?
—Sí. Nadie me llamó a mi casa. Me propusieron hacer un casting por el que pasaron otras personas. Hice la prueba y pasé un proceso de selección. No hay edad ni estatus que te ahorren esos procesos. De hecho, la llamada no la esperaba, me pilló incluso fuera de España.
—¿Qué supone regresar a la televisión?
—Una sorpresa muy grande. Lo vivo con ilusión, pero con nervios casi a partes iguales. Siempre me he puesto nerviosa, no es algo raro en mí, pero de joven eres más alocada y te tiras a la piscina.
— ¿Perdió la esperanza de volver al medio?
—No, porque no lo buscaba. He tenido la gran suerte de estar durante años en la radio, luego en la televisión y siempre en la comunicación. Estos años de parón me han servido para dedicarme a otro tipo de comunicación y compaginarlo con mi vida personal.
—¿Viene para quedarse?
—Claro que sí. Cuando una vuelve a tener ganas de estar delante de una cámara, y encima me toca este maravilloso premio, te vuelve el gusanillo y tienes muchas ganas de hacer muchas cosas. E incluso también proyectos que ya tenías en mente con tu productora o con la fundación.
—¿Qué aprendió durante el parón televisivo?
—A escuchar. Eso lo aprendí en la Cadena SER con el programa Hablar por hablar. Pensaba que era algo natural, pero me he dado cuenta de que no. Si nos escucháramos un poquito más y dejáramos al otro que se exprese, que te explique lo suyo sin que tú tengas que darle tu opinión...
—¿Deja a sus hijos ver el programa?
—Pues tienen 10 y 11 años y sí, lo han visto alguna vez y en verano obligatoriamente. Ahora las madres somos muy controladoras con lo que ven en el móvil, así que les tendré que explicar que ahora sí pueden ver la televisión. Les dejaré ver un trozo. A mí me hace ilusión que me vean. El último programa en el que yo estaba de presentadora delante de la cámara estaba dando de mamar a mi segundo hijo. Compartir con ellos la televisión y que me vean en directo me hace una ilusión tremenda.
—¿Cómo va a llevar someterse de nuevo a las audiencias?
—Estés pendiente o no, el mensaje lo recibes todos los días. Decir que no te importan es mentir absolutamente. Además, Jorge Javier me dejó el listón muy alto, con unos datos de audiencia muy buenos, y espero mantenerlos dignamente a lo largo de este verano.