La localidad sueca de Kiruna traslada por carretera una icónica iglesia de más de 600 toneladas por la ampliación de una mina
SOCIEDAD
Miles de vecinos han presenciado el cambio de emplazamiento del histórico templo, para el que se ha utilizado un tráiler con más de 200 ruedas
19 ago 2025 . Actualizado a las 18:21 h.Los vecinos de la localidad sueca de Kiruna, al norte del país, han sido testigos este martes de algo que no se ve todos los días: el traslado por carretera de su icónica iglesia de madera, de 672 toneladas y 40 metros de ancho, desde su emplazamiento original a otro al nuevo centro del pueblo, a 5 kilómetros de distancia.
«Ahora dejamos la iglesia en manos de Dios», dijo la obispo Åsa Nyström ante miles de personas para bendecir el templo antes de que comenzase su lenta travesía por carretera, que se realiza a 500 metros por hora para velar por su correcto mantenimiento.
La mudanza del templo forma parte del cambio de emplazamiento del centro de la localidad situada al norte del Círculo Polar Ártico con más de 20.000 habitantes. Un traslado, iniciado hace dos décadas y que se concluirá previsiblemente en el 2035, que está motivado por la expansión de su mina de hierro subterránea, que fue también la razón de la fundación de la localidad a principios del siglo XIX.
Para ello, el gobierno les ha ofrecido a los miles de vecinos afectados nuevas viviendas o dinero, además del traslado de una veintena de edificios históricos, aunque ninguno de la importancia o magnitud de la iglesia. Diseñado por el arquitecto sueco Gustaf Wickman, el templo está inspirado en una cabaña sami y fue inaugurado en 1912, convirtiéndose desde entonces en una de las construcciones de madera más grandes de Suecia. Destacan en su interior el retablo de su altar, pintado por el príncipe Eugenio, y su órgano.
Para facilitar este traslado sin precedentes, que se calcula que costará unos 45 millones de euros, durante los últimos meses se han ampliado los caminos y excavado más de 3.200 metros cúbicos de tierra bajo el templo para colocar las vigas de acero que descansan sobre el tráiler que lo transporta, con 224 ruedas.
Miles de vecinos no se han querido perder el espectáculo único. Algunos han acudido al propio lugar original del templo, otros han esperado a medio camino para ver el desplazamiento de la iglesia y muchos otros la han acompañado en su recorrido, como si de una procesión se tratase.
Las autoridades locales han organizado un programa con actuaciones musicales, y que incluye la visita del rey Carlos XVI Gustavo, para celebrar la mudanza de la iglesia, que pasará a estar situada entre el cementerio y el nuevo centro de Kiruna, inaugurado hace tres años.