La vicepresidenta del Gobierno sobre los fallos en el cribado de cáncer de mama en Andalucía: «El sistema sanitario público andaluz ha colapsado y es insostenible»

La Voz EUROPA PRESS / ANDALUCÍA

SOCIEDAD

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero.
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Jesús Montero. Jesús Hellín | EUROPAPRESS

Son más de 50 las mujeres afectadas por los fallos en el programa de detección precoz y la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama exige revisar todas las mamografías hechas desde el 2020

03 oct 2025 . Actualizado a las 15:08 h.

Más de 2.000 mujeres andaluzas están vilo sobre si padecen o no cáncer de mama, a causa de un «fallo de información» tras la realización de mamografías que ahora, meses y años después, sus resultados se han calificado como «no concluyentes». La Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama) cifra en más de 50 el número de mujeres afectadas por los fallos en el programa andaluz de detección precoz de esta enfermedad y exige a la Consejería de Salud que revise todas las mamografías hechas en los últimos cinco años.

Sobre esta grave crisis que pone vidas en riesgo se ha pronunciado este viernes la vicepresidenta primera del Gobierno, ministra de Hacienda y secretaria general del PSOE andaluz, María Jesús Montero, que ha alertado este viernes de que el «conjunto» del sistema sanitario público andaluz «ha colapsado» y se ha convertido en «insostenible» con el Gobierno de Juanma Moreno (PP). Así lo ha manifestado la también candidata socialista a la Presidencia de la Junta de Andalucía en los próximos comicios autonómicos en una atención a medios antes de participar en un acto sobre fondos europeos en la Diputación de Jaén. 

A preguntas de los periodistas, María Jesús Montero se ha referido a la falta de comunicación de resultados de mamografías practicadas a mujeres andaluzas en el marco de dicho programa de detección precoz, y ha advertido de que, como consecuencia de ello, en algunos casos las «consecuencias» de la enfermedad «han sido mucho peores que si se hubiera abordado antes», tras su diagnóstico.

En esa línea, ha remarcado que dicho programa «lo que pretende es evitar las muertes por cáncer de mama» promoviendo la realización de mamografías entre mujeres que permitan ver «si hay algo que todavía no ha dado la cara y que, por tanto, esto permita seguir investigando hasta que se diagnostica» la enfermedad.

Montero se ha remitido a «los testimonios» de las mujeres afectadas por dichas incidencias para explicar lo ocurrido, que ha tildado de «gravísimo», y ha aseverado que «esto no es un fallo», sino que refleja que «un circuito preferente» establecido para las mujeres de cara a prevenir el cáncer de mama «ha colapsado».

Y «si colapsa» ese «circuito preferente», es que «ha colapsado el conjunto del sistema», según ha alertado la vicepresidenta y líder socialista, que ha aseverado que sabe de lo que habla porque fue «durante diez años consejera de Salud» de la Junta de Andalucía y es médica de profesión.

«Sé de lo que hablo», ha enfatizado para incidir en advertir de que, «si esto ha colapsado, no es un problema de un programa, es que realmente» desde el Gobierno andaluz del PP han hecho «insostenible» el sistema sanitario público, según ha advertido la vicepresidenta.

La consejera de Salud de Andalucía descarta dimitir: «Sería lo fácil, mi responsabilidad es mejorar el sistema»

La consejera de Salud y Consumo de Andalucía, Rocío Hernández, ha descartado este viernes dimitir por los «errores de comunicación» en el caso de pacientes que han sufrido retrasos en las pruebas complementarias que se les solicitaron al contar con mamografías dudosas dentro del programa de detección precoz del cáncer de mama porque, según ha dicho, «dimitir sería lo fácil» y su «responsabilidad» es «mejorar el sistema».

A preguntas de la prensa en Granada sobre si se plantea dimitir por este asunto, la consejera andaluza de Salud ha defendido que «su responsabilidad va más allá» y pasa por que el sistema sanitario público de Andalucía «vaya mejorando».

«En este caso mi responsabilidad es que a estas mujeres se les informe, se les haga la prueba en el tiempo en el que el radiólogo considera que se le debe hacer e ir mejorando el programa de cribado. Es decir, esa es mi responsabilidad y lo otro, aunque alguien lo pida y lo han pedido mucho, sería una falta de responsabilidad por mi parte y sería lo fácil», ha sentenciado.

Después de que este pasado jueves la Consejería de Salud informara de que las 2.000 mujeres con pruebas no concluyentes del cribado de cáncer de mama serán llamadas «una por una», Rocío Hernández ha querido lanzar un mensaje de «tranquilidad» porque, según ha recalcado, «no hay 2.000 mujeres afectadas de cáncer que no hayan sido atendidas» sino en una «situación intermedia» por contar con lesiones dudosas que, en principio, no revisten gravedad pero que deben hacerse un seguimiento fuera del cribado bajo criterio médico.

Actualmente, cuando se realiza una mamografía a una mujer dentro del programa de cribado del cáncer de mama existen tres posibles diagnósticos: negativo, positivo y lesión posiblemente benigna. En el caso de diagnósticos negativos, las pacientes son informadas del resultado; en el caso de diagnósticos positivos, las mujeres son igualmente informadas y derivadas para nuevos procedimientos pero, en los casos en los que se detectan lesiones posiblemente benignas las mujeres pueden no haber sido informadas de que su caso sigue un procedimiento clínico con supervisión médica.

La consejera ha explicado que, en estos casos, hasta tres radiólogos analizan las imágenes y, en función de los factores de riesgo de cada paciente, deciden el tiempo que ha de transcurrir para la segunda prueba.

Algunas de estas mujeres en esa fase intermedia «no han sido informadas» sobre «cuál es la situación», ha reconocido, pero ha garantizado que «no es que estuvieran desatendidas o que haya habido retrasos» sino que «seguían todo el proceso» y lo que ha pasado es que «no se les estaba informado» de que «cuál era la situación» y ahora «se está incorporando ese mensaje para estos casos dudosos» de modo que si tienen «una mamografía dentro de seis meses o un año lo van a saber».

La consejera ha incidido en que el 98 % de estos casos que necesitan una segunda prueba diagnóstica terminan siendo diagnosticados como benignos y «no tienen cáncer». Algunas de ellas ya han sido informadas, pero la consejería las volverá a llamarlas «a todas» para informarles.

Rocío Hernández no cree que se haya «minimizado» este asunto. «Aunque sí es verdad que ya nos han dicho que habían informado anteriormente, nosotros cuando comenzamos a conocer estos casos fue la semana pasada y asumimos la responsabilidad, y yo como consejera asumo la responsabilidad desde que soy consejera y tengo información de que algo puede estar ocurriendo», ha sostenido.

Ha defendido así que «desde ese primer momento nos pusimos a revisar todo el proceso del cribado del cáncer de mamá para ver dónde estaba ese fallo de comunicación, lo detectamos y lo que hemos hecho es poner las medidas y ayer mismo se empezó ya a llamar a las mujeres».

«Hemos detectado un problema, somos totalmente transparentes porque nuestro compromiso es poner soluciones a las cuestiones que vamos encontrando que evidentemente en un sistema sanitario de más de 8,6 millones de personas hay cuestiones que habrá que ir solventando y en este caso es lo que estamos haciendo ahora, asumiendo esa responsabilidad», ha expuesto.

Vox ve a Moreno «principal responsable» del fallo en cribrados de cáncer de mama

El portavoz de Vox en el Parlamento andaluz, Manuel Gavira, ha considerado este viernes como «principal responsable» de la situación generada con el programa de cribado de cáncer de mama al presidente de la Junta, Juanma Moreno, quien «no puede escudarse en profesionales».

En declaraciones a Canal Sur Radio, recogidas por Europa Press, Gavira ha manifestado que las explicaciones y la gestión que el Gobierno andaluz está haciendo de la situación «no es suficiente», porque al principio ha tratado de trasladar que «parecía algo residual, testimonial, y ya vamos por 2.000 mujeres» a las que hay que llamar para citarlas a pruebas complementarias ante sospecha de posible cáncer.

Ha considerado que esta situación no es precisamente «responsabilidad» de la actual consejera de Salud, Rocío Hernández, que «lleva un año» y parece que «los retrasos» en las citaciones de mujeres vienen de la anterior legislatura, con lo que estamos más bien ante «un problema del sistema», y «la responsabilidad máxima» la tiene el presidente de la Junta.

El problema radica, a su juicio, en el modelo de gestión de la atención sanitaria, al que «hay que dar un cambio», ya que el actual Gobierno del PP en Andalucía está aplicando las «mismas políticas» de los anteriores ejecutivos del PSOE-A tanto en la gestión como en la contratación.

Ha insistido en que las explicaciones que ha dado Moreno sobre lo ocurrido «no son suficientes» y «no se puede frivolizar con este tema, con decir que van a cambiar el protocolo, porque no solo tienen que cambiar el protocolo del Servicio Andaluz de Salud, sino también de esas empresas que han sido adjudicatarias de esos controles, porque no solo es el servicio público, también hay conciertos por medio».

Ha añadido que «no es una cuestión de dimisión de la consejera, sino que es una cuestión de cambiar políticas y de quién es el principal responsable de esa competencia, que es Moreno Bonilla», que lo que está haciendo es «escudarse detrás de los profesionales».

«Si los protocolos no funcionan, no vale decir esto es que venía del pasado», ha indicado Manuel Gavira, insistiendo en que Moreno está «frivolizando» con este asunto porque los retrasos en las citas vienen desde hace años y «no se tomaron medidas» en ese momento.

Facua Andalucía pide a la Junta aclarar si «la falta de información» se ha producido en otros tipos de cáncer

Facua Andalucía ha reclamado a la Junta de Andalucía que aclare «si los fallos y falta de información» se ha detectado «únicamente» en el programa de detección del cáncer de mama o si estos errores se han podido producir también en otros programas de prevención o pruebas diagnósticas relacionadas con otros tipos de cáncer. Bajo este contexto, la federación ha calificado lo ocurrido como «el mayor escándalo» de la sanidad pública andaluza «de toda la democracia».

En una nota, la entidad ha exigido al presidente de la Junta, Juanma Moreno, que «sea consecuente» y cese de su puesto a la consejera de Salud y Consumo, Rocío Hernández, tras confirmarse que ha habido de «una gestión negligente e irresponsable que ha puesto en entredicho la salud de muchas usuarias» del Servicio Andaluz de Salud (SAS), ha demandado.

Asimismo, ha señalado que la Junta ha reconocido este jueves que son 2.000 las mujeres con un diagnóstico previo no concluyente de cáncer de mama pendientes de que las llamen para confirmar o descartar la enfermedad.

Además, Facua ha criticado que «no es de recibo» que se mantenga en el cargo la responsable de un área que, «lejos de reconocer los errores y abordar el problema con transparencia y garantías, llegó a decir que se trataba de un escenario puntual en el que había afectados dos o tres casos». «Es más, pidió dejar la manipulación del sistema público de salud tras escuchar el testimonio de una de las mujeres afectadas a las que el diagnóstico de cáncer le llegó dos años después», ha añadido.

Facua Andalucía ha pedido al Gobierno andaluz que sea «transparente» y que aclare si este problema está delimitado al programa de detección del cáncer de mama o si también se ha podido producir en otros programas de prevención como el cribado de cáncer colorrectal o el de detección de cáncer de cuello de útero.

En este sentido, la entidad ha criticado que este «grave error» ha generado en todos los usuarios del SAS, y especialmente en las mujeres, «miedo y desconfianza sobre un sistema de notificaciones que no ha funcionado, llegando a poner en peligro la vida de muchas de ellas».

Por ello, la federación ha exigido una «respuesta rápida y contundente» por parte de la administración para que las personas afectadas por esta falta de información puedan ser tratadas y estudiadas a la mayor brevedad posible.

Del mismo modo, ha demandado que se comunique «de manera transparente» los cambios que se van a implementar en el sistema para garantizar que las usuarias del servicio sanitario reciban en plazo tanto los resultados como las indicaciones de actuación correspondientes. Además, ha instado a la Junta a habilitar «un procedimiento extraordinario de reparación a las víctimas, con cauces específicos de reclamación patrimonial y apoyo jurídico y psicológico».