Un estudio hecho público esta semana revela a los famosos más atractivos e incluye a la casta política: desde Rufián hasta Ayuso pasando por Albert Rivera, Pedro Sánchez o Inés Arrimadas
16 nov 2025 . Actualizado a las 21:21 h.Lo bueno de las fantasías es que no tienen límites ni precisan explicaciones. Y lo malo... pues lo mismo. Por eso cuando se expresan ?porque muchas veces no salen del ámbito más íntimo? causan sorpresa, risitas nerviosas y hasta estupor e incredulidad. Un estudio hecho público esta semana sobre los famosos más deseados de España y que incluye a la casta política ha arrojado algunos resultados...¿previsibles?, ¿increíbles? Según a quién preguntemos.
Según el dosier ?elaborado por la firma de bienestar Diversual mediante encuestas a más de 5.000 personas de distintas edades y comunidades autónomas?, Gabriel Rufián (ERC) es el político masculino más deseado del país, con un 27% de los votos, seguido por Pedro Sánchez (PSOE) con un 24% y Albert Rivera (ex-Ciudadanos) con un 23%, porque, a pesar de estar retirado, sigue levantando pasiones.
¿Y qué hay más allá de ese podio de honor de los tres primeros? Pues está Santiago Abascal en cuarta posición con un 15% de los votos y, ya bajando a las catacumbas del deseo, pero ahí en el listado, Íñigo Errejón (también desaparecido tras sus escándalos).
¿Y las mujeres de la política española? La auténtica reina del deseo es Isabel Díaz Ayuso, que arrasa al alcanzar un 35% y se consolida como la figura más atractiva y deseada del panorama político español, seguida por Inés Arrimadas (expresidenta de Cs) con un 24% e Irene Montero (Podemos), que se abre paso en la tercera posición con un 17%. Miriam Nogueras (Junts), en cuarta, y Yolanda Díaz (Sumar), en quinta, completan el ránking.
Al margen de gustos, un aspecto relevante de este estudio es que los políticos y políticas están bien colocados en la lista de más deseados incluso cuando se les mete en el saco con otros famosos (deportistas, artistas). Así, por ejemplo, Ayuso sigue siendo la famosa que más fantasías suscita (8%), por delante de Cristina Pedroche (6%), Alexia Putellas (6%) o Nuria Roca (6%). Y Arrimadas, en este ránking general, está en quinta posición (5%), por encima de bellezones como Ana de Armas (5%) o Blanca Suárez (3%).
En el apartado masculino el tirón de los políticos decae un poco, ya que el hegemónico Rufián pasa a una cuarta posición tras famosos de otras esferas como Miguel Ángel Silvestre,David Broncano y Marc Márquez. Aun así, Pedro Sánchez y Albert Rivera (hay que ver qué buenos recuerdos ha dejado este hombre) siguen en la parte alta de la tabla por delante de guapérrimos como Mario Casas o Jon Kortajarena.
Esto solo lo explica eso de la erótica del poder. «Conseguir la aprobación de alguien con mucho poder te coloca en una posición de mayor valor (todo esto, psicológicamente, claro). Por eso tiene mayor efecto en personas con menor autoestima», sentencia Lucía Jiménez, sexóloga de Diversual. Es decir, si te enloquece alguien de la casta política y no es por razones más o menos objetivas..., háztelo mirar. Lo cierto es que hay mucho trasfondo psicológico para explicar el tirón de los políticos con los que más fantaseamos sexualmente. La psicóloga Lara Ferreiro ?autora de Ni un capullo más? analiza cuál es el tirón de los cuatro políticos más deseados.
Gabriel Rufián (ERC)
«Mezcla intelecto, peligro y juego. Su atractivo no se construye desde la belleza normativa, sino desde la energía de disidencia, ese magnetismo de quien no busca encajar, sino destacar. Su estética —barba recortada, camisas oscuras, americana entallada y mirada desafiante— comunica independencia. En psicología del deseo, esta combinación se llama estética de oposición atractiva: el poder de quien se distingue sin proponérselo».
Pedro Sánchez (PSOE)
«Representa el poder tranquilo, el dominio elegante y la masculinidad contenida. Es el ejemplo perfecto del erotismo del autocontrol. En psicología del poder, esto se conoce como autoridad silenciosa, una de las formas más efectivas —y más eróticas— de liderazgo. Su estilo es calculado hasta el detalle: cada elemento visual refuerza su imagen de estabilidad. En el plano simbólico, Sánchez encarna el arquetipo del protector racional, una figura profundamente erótica en tiempos de incertidumbre».
Isabel Díaz Ayuso (PP)
«En la psicología contemporánea del poder, su figura activa el síndrome de la mujer alfa, el patrón erótico que define a las mujeres que mandan sin pedir permiso. Su forma de vestir está cuidadosamente equilibrada entre lo institucional y lo personal. En otras palabras, puede mandar y gustar a la vez. Psicológicamente, su erotismo nace de la tensión entre la cercanía y la imposibilidad. Es visible, pero inaccesible; mediática, pero misteriosa. Su sonrisa ligera y su tono desafiante despiertan el deseo del reto».
Inés Arrimadas (Ciudadanos)
«Representa la elegancia emocional convertida en deseo. No conquista con la provocación, sino con la serenidad. En psicología del deseo, este patrón se conoce como síndrome del orden emocional: la atracción que genera quien transmite estabilidad interna, dominio de sí y armonía entre lo que dice, lo que siente y lo que muestra. Su forma de vestir refuerza esa percepción».