La Berlinale arranca hoy con mucho cine político y algo del glamur de Hollywood

Úrsula Moreno CORRESPONSAL EN BERLÍN

TELEVISIÓN

MIGUEL VILLAGRAN

Sigourney Weaver y Alan Rickman asistirán al estreno de la película que abre el certamen En el festival se proyectarán más de 300 filmes, 19 de los cuales compiten por el Oso de Oro

08 feb 2006 . Actualizado a las 06:00 h.

«Cine cercano a la realidad, personal y de fuerte compromiso político» es lo que prometía hace unos días el director del Festival Internacional de Cine de Berlín, Dieter Kosslick. Aunque en esta 56 edición tampoco faltarán el sexo y el fútbol, indispensable a falta de cuatro meses para el Mundial. La Berlinale, cuya gala inaugural se retransmitirá en directo por primera vez, arranca hoy con Snow Cake , el psicodrama del británico Marc Evans sobre un hombre (Alan Rickman) que sufre un accidente con su automóvil y mata a la joven que había accedido a llevar. Sigourney Weaver, que encarna a la madre autista de la víctima, no faltará hoy a la cita con la prensa. Miles de espectadores Hasta el día 19, la futurista Potsdamer Platz berlinesa vivirá un continuo frenesí, con casi 4.000 críticos y periodistas yendo y viniendo para no perderse lo mejor de las más de 300 películas que se exhiben en las diferentes secciones y que la organización prevé que vean unos 150.000 espectadores. Diecinueve filmes compiten por el Oso de Oro, entre los que destacan los de los veteranos Sidney Lumet, Robert Altman y Claude Chabrol. Pero tanta o más expectación despiertan las cintas fuera de concurso. Como Syriana , del debutante Stephen Gaghan (guionista de Traffic ) y protagonizada por George Clooney. Venerado como pocos por el público femenino, Clooney no perderá la oportunidad de promocionar este thriller sobre las intrigas y la corrupción de los consorcios petroleros en Irak, que tan buenas críticas ha recibido ya en EE.?UU. Aunque el tono de denuncia es más explícito en otras tres cintas en concurso. Una es la iraní Zemestan ( Es invierno ), de Rafi Pitts, que cuenta como el afán de supervivencia lleva a un padre de familia de Teherán a buscar trabajo en el extranjero. Otra, del mismo país, es Offside , sobre las peripecias de una joven aficionada al fútbol que se disfraza de hombre para poder acceder al estadio, algo prohibido a las mujeres en Irán. Lo último de Winterbottom Tras treinta años de sequía, vuelve pues el cine iraní, justo cuando copa los titulares de la política. Otro tanto ocurre con la cárcel de Guantánamo, que centra el docuficción de Michael Winterbottom, Road to Guantanamo . Este asiduo de la Berlinale -Oso de Oro en el 2002 con In this World - recrea la historia verídica de tres británicos de origen árabe, capturados en Afganistán y torturados en la base norteamericana. Fuerte protagonismo tendrá el cine alemán, del que Kosslick, el director de la Berlinale, se ha convertido en principal abanderado. Con cuatro películas en competición, destaca Partículas elementales , de Oskar Roehler, considerado el nuevo Fassbinder. Basado en la novela homónima de Michel Houellebecq, presenta a todo el elenco actual del cine germano.