Hollywood vivirá esta madrugada la edición más latina de los premios del cine Penélope Cruz ?hace historia con ?su candidatura, pese a la condición de favorita de Mirren
24 feb 2007 . Actualizado a las 06:00 h.Esta madrugada, Hollywood se volverá a vestir de gala para la 79.ª edición de los Oscar, los premios por excelencia del celuloide y en cuya entrega la industria cinematográfica norteamericana gasta millones de dólares. Para España, la ceremonia de las estatuillas doradas, galardones en los que cada vez tienen más presencia producciones de todo el mundo, está marcada por Penélope Cruz, la primera actriz nacional que opta al Oscar por la película Volver, del doblemente oscarizado Pedro Almodóvar. Este año, nuestro país tiene un protagonismo especial no sólo por la nominación de Cruz, sino también porque los españoles Javier Navarrete -mejor banda sonora original-, Pilar Revuelta -dirección artística- y David Martí y Montse Ribé -mejor maquillaje de efectos especiales- son candidatos por su trabajo en la coproducción hispanomexicana El laberinto del fauno. Además, entre los cinco cortos que optan al entorchado están Éramos pocos, del donostiarra Borja Cobeaga, y Binta y la gran idea, del madrileño Javier Fesser, trabajos que, según las encuestas, tienen muchas posibilidades de estar en el palmarés. Pero en la que ha sido bautizada como la fiesta más latina de Hollywood por las siete opciones a premio que tiene Babel, las seis de la exitosa El laberinto del fauno y las tres de Hijos de los hombres, firmadas por los mexicanos Alejandro González Iñárritu, Guillermo del Toro y Alfonso Cuarón, respectivamente, los ojos están puestos en dos de los grandes cineastas en activo: Clint Eastwood y Martin Scorsese. Como en el 2005 Eastwood, de 76 años, y Scorsese, de 64, vuelven a pelear por el Oscar al mejor director como en el 2005, año en el que Eastwood se impuso con Million Dollar Baby al trabajo del director italoamericano, El aviador. Muchos esperan que en el Kodak Theatre se repita la emoción que Scorsese vivió cuando fue reconocido por el Sindicato de Directores Norteamericanos por Infiltrados, versión del filme hongkonés Juego sucio, que aspira a cinco trofeos, entre ellos al de mejor película y director. Para Scorsese es el sexto intento en hacerse con el Oscar al mejor director, galardón que no se llevó ni por Uno de los nuestros ni por Toro salvaje. Las encuestas dicen que este es su año a pesar de tener enfrente a Eastwood, que puede sumar a los dos Oscar como mejor realizador -Sin perdón y Million Dollar Baby- un tercero por Cartas de Iwo Jima, título en japonés que recrea, desde el lado nipón, la sangrienta batalla entre Estados Unidos y el país del sol naciente. Estos dos pesos pesados tienen como contrincantes al primer director mexicano que aspira a este galardón, Alejandro González Iñárritu, muy de moda en la meca del cine con su propuesta coral Babel; y a los británicos Stephen Frears y Paul Greengrass, los autores de La reina y United 93, filme centrado en uno de los aviones secuestrados el 11-S que iba hacia Washington y acabó estrellándose. Aunque tiene muy difícil salir del Kodak Theatre con el Oscar debajo del brazo, Penélope Cruz ya ha hecho historia al medirse con cuatro monstruos de la interpretación. Es decir, con la gran favorita, la británica Helen Mirren -La reina-; la que es la actriz más nominada a estos premios, Meryl Streep -El diablo viste de Prada-; la veterana Judi Dench -Diario de un escándalo- y Kate Winslet -Juegos secretos-. Además, la carrera norteamericana de Cruz ha dado un giro gracias al personaje de Raimunda.