La intriga de «Serramoura» convierte de nuevo a la serie en líder del domingo en Galicia

L. M. REDACCIÓN / LA VOZ

TELEVISIÓN

El dispensario del médico Emilio fue asaltado en el segundo episodio.
El dispensario del médico Emilio fue asaltado en el segundo episodio.

La ficción producida por Voz Audiovisual vuelve a situar a TVG por delante de la oferta de las cadenas nacionales

14 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Los espectadores gallegos se han rendido a la adicción de Serramoura. La trepidante historia de este thriller rural y la necesidad de resolver el enigma de quién mató a Mónica Triáns volvió a convertir a la gran apuesta de Voz Audiovisual y Televisión de Galicia en líder de la noche del domingo después del partido de fútbol de La 1. Ni el cine de Antena 3 y La 1, que fueron líderes en el resto del país, ni el debate de Gran hermano 15 lograron eclipsar a esta intriga ambientada en el mundo de la madera y en la Galicia más próxima.

En su segunda entrega, la ficción gallega marcó una cuota de pantalla del 16,6 % y 181.000 espectadores de media. El minuto de oro (que en realidad fueron don minutos seguidos) llegó entre las 23.35 y las 23.37 horas, con un share del 21,2 % y 223.000 espectadores.

La serie se posicionó en Galicia a una considerable distancia de su competidor más cercano en los canales nacionales, la película de La 1 (Legión), que, a pesar del arrastre de audiencia de la emisión del partido de la selección española, marcó en Galicia un 14,2 % de share y 148.000 espectadores de media. Por detrás quedaron también Torrente 4 (Antena 3), con un 14,5 % y 144.000 espectadores; Gran Hermano (Telecinco), con un 15,4 % y 120.000 espectadores y el resto de ofertas de la noche.

Serramoura, que llega de la mano de Voz Audiovisual, productora de grandes éxitos como Mareas vivas, Padre Casares o Matalobos, cuenta la historia de una tranquila villa del interior de Galicia que vive de la explotación de sus recursos madereros. Este escenario se ve bruscamente alterado al aparecer brutalmente asesinada una de sus vecinas.

En el segundo capítulo, un nuevo caso complicó la investigación. Un asalto con agresión en el dispensario de la villa, dirigido por el médico Emilio de la Cruz (pareja de la sargento Neira), puso a los agentes tras la pista de un toxicómano. Pronto las investigaciones hallaron un inquietante nexo entre este suceso y el asesinato de Mónica Triáns.