Leiva habla sobre su salud en «El Hormiguero»: «No puedo verme como un minusválido, me veo como un tipo con mucha suerte»

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Captura de la entrevista de Leiva en «El Hormiguero»
Captura de la entrevista de Leiva en «El Hormiguero» El hormiguero, redes sociales, 2025

El cantante estuvo en el plató de Antena 3 para presentar el documental que protagoniza «Hasta que me quede sin voz» a estrenarse este viernes 17 de octubre

17 oct 2025 . Actualizado a las 12:23 h.

En el último programa de la semana de El Hormiguero, Pablo Motos recibió a José Miguel Conejo Torres, más conocido como Leiva. El cantante asistió al plató de Antena 3 para promocionar su documental Hasta que me quede sin voz, que se estrena este viernes, 17 de octubre, en cines. La película fue realizada por un grupo de amigos del artista: Mario Forniés, Lucas Nolla y Sepia

El cantante de Como si fueras a morir mañana aclaró que esta pieza audiovisual no es suya: «Esto es un proyecto de unos amigos míos, no es un documental mío, no es un autobombo. Es un proyecto de unos colegas de mi barrio del que yo soy el protagonista». El artista cree que el punto interesante es mostrar la dualidad, las «luces y sombras» de un «chico de barrio», que en algunos momentos tiene «una vida frenética», y, en otros, simplemente «problemas supernormales». 

El presentador del programa recomendó mirar el documental por la forma transparente y real de mostrar al exintegrante de Pereza. Sobre esto, Leiva aseguró: «Una de las líneas rojas era que saliera muy glorificado y que no se pareciera a mí. Al final mi vida tiene sus ruinas, debilidades y fragilidades». Además, añadió que él como espectador no disfruta de ver documentales poco realistas: «Me aburre cuando veo un documental que están todo el tiempo brindado por los Grammys que ganan, si contamos las cosas, las contamos de verdad, quitándole el velo o esa distorsión que se tiene de la vida de los músicos». 

Entre los temas que aborda el documental se encuentra el accidente que sufrió el cantante a los 12 años y que tuvo como resultado la pérdida de la vista en un ojo: «Tuve un accidente, me dispararon de muy cerquita con una pistola, perdí el ojo y, claro, no tenía, ni córnea, ni iris, ni blanco: era como una masa gris. Entonces en el barrio corrió como la pólvora, todos los chicos, cuando yo llegaba a los sitios, cuchicheaban: "Este es al que le han disparado"». El amigo de Joaquín Sabina aclaró que la idea de incluir este episodio que marcó su vida no es en un «contexto morboso y gratuito», sino que «está relacionado con luego la posterior popularidad». Añadió: «De muy chiquito me acostumbré a que me miraran porque yo tenía una cuestión estética rara. Luego, ya con 19 o 20 años, empecé con la banda y la cosa empezó a crecer. Tuve cierta popularidad, yo tenía una sensación como de familiaridad: "Ostras, esto lo he vivido". Me sirvió un poco de entrenamiento».

El músico e intérprete Leiva, el director Mario Forniés, el director, guionista y productor Lucas Nolla, y el productor y guionista Sepia posan este jueves en la 73 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, donde presentan la película 'Hasta que me quede sin voz'.
El músico e intérprete Leiva, el director Mario Forniés, el director, guionista y productor Lucas Nolla, y el productor y guionista Sepia posan este jueves en la 73 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, donde presentan la película 'Hasta que me quede sin voz'. Javier Etxezarreta | EFE

La salud del artista ha tenido sus dificultades y la condición de sus cuerdas vocales ha definido su forma de trabajar, algo que también se refleja en la película. «No tengo un problema grave, porque los problemas graves son otros. Pero tengo un problema importante en una cuerda vocal y soy cantante», explicó Leiva. El músico detalló cómo es su tratamiento para poder realizar sus giras: «Para salir de gira necesito entrar en quirófano. Me inyectan una sustancia en la cuerda vocal que me ayuda a tener más fuelle y a poder encarar una gira tratando de evitar las afonías que yo tengo muy habituales». 

De todos modos, el madrileño demostró que nada de eso lo detiene y que poder seguir dedicándose a la música es una suerte. «Tengo que ver el vaso medio lleno. Puedo seguir cantando, puedo seguir haciendo giras. Antes hacía 80 conciertos y ahora hago 30; ya no puedo hacer dos seguidos porque empiezan los riesgos, pero puedo». Por eso, Leiva busca demostrar que, aun con estos problemas de salud, sigue siendo afortunado: «No puedo verme como un minusválido, me veo como un tipo con mucha suerte»

El productor musical cree que su éxito puede tener más que ver con la suerte que con su trabajo: «Creo que la injerencia o la interferencia de la suerte en mi vida es más importante que el talento y el esfuerzo». Y explicó: «Tengo un par de casi hernias en la espalda de estar 25 años a pico y pala. Pero las cosas que han cambiado mi vida han sido encuentros y situaciones que yo no he propiciado. Estoy seguro de que la suerte tiene una interferencia muy grande». 

El programa terminó siendo el más visto de toda la televisión. La visita de Leiva coronó a El Hormiguero como líder de audiencias, con un 17,6 % de cuota de pantalla, dos millones de espectadores de media y 4,7 millones de espectadores únicos.