Habitual en los deportes de agua, este tejido se ha reinventado para inundar los armarios en todas las formas y colores
12 sep 2014 . Actualizado a las 20:35 h.Los diseñadores de moda no lo tienen fácil. Cada temporada se les exige que innoven, que cambien, que sorprendan. Volver a repetir los exitosos patrones que triunfaron en colecciones anteriores es prácticamente un suicidio en una industria tan exigente como la de la aguja y el hilo. Tal es la presión a la que se ven sometidos los modistos, que no les queda otra que explorar, innovar y encontrar caminos vírgenes que no hayan sido explorados con anterioridad. No es un trabajo fácil. Hallar cosas nuevas en un mundo en el que prácticamente está todo visto es una ardua labor de investigación que no empieza ni termina en la pasarela o en el estudio de creación de turno. Se buscan nuevos diseños, cortes, estampados, colores y, lo más difícil pero más deseado, tejidos.
Uno de los nuevos lienzos que han saltado a la pasarela, y con ello a la calle, recientemente ha sido el neopreno. Sí, el neopreno ese tejido con el veíamos y vemos vestidos, sobre todo aunque no son los únicos, a muchos deportistas, como los surfistas y los buceadores. Conscientes de que era un hueco sin explorar y sabiendo que hoy en día todo está permitido, los diseñadores se lanzaron a la piscina, traspasaron la frontera e intentaron romper posible prejuicios al imponerlo para caminar por la calle y no para salir a surfear o a bucear. Este soplo de aire fresco llegó de la mano de Alexander McQueen, Balenciaga, Raf Simon o Calvin Klein, pero pronto lo siguieron otros modistos, como Juanjo Oliva y Ana Locking en los tapetes más próximos, que no dudaron en que podía triunfar en esa pasarela que es la calle. Vieron sus posibilidades y descubrieron que era un material fácil con el que trabajar, sobre todo para crear volúmenes. Si triunfaron las deportivas como accesorios para los vestidos de alta costura, ¿por qué no lo iba a hacer un material tradicionalmente deportivo y náutico?
Así, poco a poco, metiendo la patita con un par de prendas cada temporada, el neopreno ha llegado para quedarse, y por mucho tiempo, y no como parte de la moda de baño. Su flexibilidad, resistencia y su adaptabilidad al cuerpo hace del neopreno un tejido irrechazable y al que nadie le puede decir que no. Y, además, de cara al otoño y al invierno es uno de los imprescindibles ya que además también protege contra el frío. Y así, ni corto ni perezoso, Juanjo Oliva en su colección Elogy para El Corte Inglés para esta temporada -que ya podemos encontrar en las tiendas- ya avanzó en febrero en la Madrid Fashion Week que el neopreno sería básico para los próximos meses. Y ahora que llega a la tienda queda más que patente, y cabe señalar que no entiende de sexos. Sudaderas de manga francesa o en color azul para el día a día, o un vestido corto con escote de corazón para marcar la diferencia en las noches no son las únicas posibilidades. Al carro del éxito también se han sumado abrigos, camisetas, calzado y bolsos.