











«Es bueno para nosotros porque sabemos que el Betis va a pelear por no bajar a Segunda», ironizó el lateral horas después de la presentación del madrileño como nuevo entrenador del club andaluz
15 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Seis meses y un día después de que Víctor Sánchez del Amo sorprendiera con una esperpéntica rueda de prensa en la que acusaba a Luisinho de haberlo amenazado, el portugués tuvo su pequeña venganza.
El reciente fichaje del técnico madrileño por el Betis sirvió para que Luisinho le enviara un recado en forma de dardo envenenado. Preguntado sobre su regreso a la Liga después de haber sido destituido en el Olympiakos sin iniciar incluso la Liga, el luso no respondió. Primero hizo un amago de evitar la confrontación: «¿Qué quieres que yo diga? Ya no es nuestro entrenador, sino de un equipo rival y en cuanto a eso no puedo decir nada más sobre Víctor Sánchez del Amo». Pero a la segunda referencia al tema, Luisinho ya no se contuvo: «Tuvo suerte de conseguir un club y, bueno, es bueno para nosotros porque sabemos que el Betis va a pelear por no bajar a Segunda», concluyó el lateral.
De esta manera, el portugués dio su particular bienvenida a Víctor en su regreso al fútbol español. Es la primera vez que habla sobre el que fuera su entrenador desde que este arremetiera contra él antes del último encuentro de la temporada pasada. En cada una de sus intervenciones públicas, Luisinho optó por dar la callada por respuesta. Pero dentro tenía clavada la espina, no solo de aquella surrealista rueda de prensa de mayo, sino del comportamiento del entrenador durante el pasado verano.
Al portugués le llegaron informaciones de que Víctor dio informes negativos sobre él a algunos clubes que preguntaron por él durante el mercado estival y eso es algo que no olvida. Ahora, sin levantar la voz y en la última de sus respuestas, lanza un dardo envenenado a un técnico que, tras salvar al equipo en la penúltima jornada, fue destituido por la pésima gestión que había hecho del vestuario.
Y lo hace el día en el que el madrileño fue presentado como técnico verdiblanco. Un acto en el que el entrenador echó mano de todos los tópicos habituales en sus comparecencias para hablar de la importancia que tiene el Betis como, «un club gigante», de su afición que es «lo más grande que tiene este club» y de que «el tiempo es tan valioso que no se puede perder ni un minuto en cosas que no sean fútbol».
El madrileño explicó que su objetivo es «ganar y transmitir a nuestra afición» y, aunque su fichaje no se concretó hasta el pasado viernes por la noche, admitió que antes de la destitución de Poyet ya había mantenido contactos con el Betis para ocupar el sitio del uruguayo, momento en el que ya se puso a trabajar.
Alusiones de Víctor al Dépor
En su presentación, Víctor, que firma esta temporada con opción a otra, aludió en dos ocasiones al Deportivo. La primera fue para hablar del ambiente que se había encontrado cuando aterrizó en A Coruña: «El mundo del fútbol tiene este tipo de situaciones. He pasado situaciones parecidas. Hasta hoy, no he tenido la suerte de pertenecer a esta casa (por el Betis), pero he vivido momentos de tensión y crispación. Como primer entrenador, cuando llegué al Dépor había un ambiente social muy complicado con muchos problemas con los Riazor Blues. Existía una desconexión con el equipo y con la dirección deportiva por los malos resultados», subrayó. La segunda fue cuando recordó que había llegado un jueves al conjunto coruñés y que el domingo tenía un difícil compromiso en Anoeta.
Horas después, Sánchez del Amo se encontró con la bienvenida de Luisinho, mil kilómetros al noroeste.