Seedorf recupera para el vital partido de mañana a su mejor «centrador» en un equipo coruñés con el mayor porcentaje de goles de cabeza de la Liga
13 abr 2018 . Actualizado a las 19:28 h.Vuelve Luisinho a San Mamés. Allí donde saben de buena tinta que un centro certero es medio gol, el mejor centrador del Dépor llega a tiempo para sumarse a la machada histórica que su equipo necesita para seguir en Primera División. Ausente contra el Málaga por sanción, y con apenas un único partido completo desde febrero, todo apunta a que Seedorf confiará en el portugués, como había hecho contra el Atlético, cuando su aparición no se trató de un refuerzo cualquiera.
En el Metropolitano ofreció un resumen de su mejor repertorio. No en vano, el Deportivo juega ahora con un sistema que deja las bandas libres para que sus laterales puedan cabalgar a gusto. Y por ahí se disfrutan las cualidades del jugador con más temporadas de blanquiazul de la plantilla: sube, baja, se asocia con sus compañeros e imprime carácter. Un centro a Lucas en el primer palo, con el que el delantero exigió una buena parada de Oblak, se convirtió en su mejor aportación ofensiva, mientras en defensa se ganó una amonestación en los primeros minutos del partido.
Ahora su regreso no se torna banal. Porcentualmente, en ningún otro equipo de la Liga el acierto de cabeza tiene tanto peso como en el Dépor. Los coruñeses han marcado con la testa 10 de los 29 que llevan, lo que supone el 34,48?%. Así que Luisinho, el que mejor pone los centros, se convierte en una suerte de flautista de Hamelin de los goles de su equipo, un socio preferente para el acierto blanquiazul.
Con Borges
Y, ojo, que muy probablemente no regrese solo. Las bajas en el centro del campo provocarán la entrada de Borges, el mejor rematador de cabeza del Dépor, o al menos aquel que más ha explotado su altura y, sobre todo, su buena lectura de juego para sorprender a las defensas rivales. Ambos se asociaron en el primer gol de los tres del costarricense, todos en la primera vuelta. Ocurrió a domicilio contra el Espanyol, cuando Luisinho penetró hasta la línea de fondo y el mediocentro cazó su pase atrás para besar la red. Este fue con el pie, pero los dos de Las Palmas llegaron de cabeza, uno de centro desde la derecha y el otro de córner.
Mañana (20.45 horas, beIN LaLiga) va a sufrir mucha más competencia aérea. El Athletic se destaca como el que más duelos aéreos gana, el 54 %, por tanto más de la mitad de los que sus jugadores intentan, pero la distancia entre el Dépor y su próximo rival se acorta cuando se habla de centros al área: 20 por partido los vizcaínos, 19 en el caso coruñés. Pero su origen resulta bien diferente. Mientras los blanquiazules atacan por la izquierda como casi ningún otro equipo de la Liga (el 39?%), muchas veces a lomos de ese empuje y acierto de Luisinho, mientras el Athletic prefiere la derecha (el 42?%), quizá gracias a las carreras de Williams y De Marcos.
San Mamés no despierta malos recuerdos en el portugués. Su único partido en Bilbao de los cuatro que ha disputado contra el Athletic fue aquel del gol de Lopo. Jugó entonces en el centro del campo, respaldado en defensa por Manuel Pablo, y antes del gol épico del central generó una ocasión en la que se perfiló con la pierna derecha tras superar a dos rivales, pero su disparo lamió el palo. En principio, ahora al Deportivo no le llegaría con repetir aquel feliz empate para seguir a la caza del Levante, pero la vuelta de Luisinho y la de Borges le reabre la banda izquierda y potencia su factor sorpresa en busca de las últimas migajas por la salvación.