Estadísticamente está demostrado que subir el primer año es más que complicado. El Dépor juega con la ventaja y, a la vez, la desventaja de haberlo hecho en dos ocasiones. Digo la ventaja porque ya sabe cómo tiene que actuar y la afición sabe lo difícil que es la categoría. Pero la desventaja es que eso puede llegar a generar prisas por lograr el objetivo antes de tiempo.
Dicen, y espero que se cumpla, que no hay dos sin tres. Pero no será fácil. Lo primero que hay que hacer es olvidarse de lo que sucedió. Hay que partir de cero. Los otros ascensos no dan puntos ahora.
Incluso aunque no se comience bien, no hay que ponerse nerviosos. Nosotros ahora tenemos en mente una temporada histórica, con récord de puntos. Pero hasta llegar ahí pasamos momentos duros. Sobre todo al principio. Con la goleada en Alcorcón o la derrota semanas después en Alcoy. Casos como el del Levante la pasada temporada son poco frecuentes. Y este año se ha visto cómo el Osasuna y el Granada han quedado fuera y el Sporting solo ha podido meterse en play-off.
Los recién descendidos son candidatos claros. Pero si eso no se entiende bien, será un problema añadido, porque ser favorito no te garantiza nada. Y menos pensar que en diciembre tienes que estar ascendido. Hay que ir paso a paso. Ser uno más. Con humildad y, vuelvo a repetir que, ante todo, mucha calma.