Duelen sobre todo las formas del empate del Deportivo

José Manuel Pose

TORRE DE MARATHÓN

César Quian

08 dic 2018 . Actualizado a las 20:48 h.

Es la forma la que más duele en el empate del Deportivo, sobre todo por lo malacostumbrada que comenzaba a estar la parroquia deportivista. En el guion de todos el 2-0 al descanso era, en realidad y por sensaciones, un 4-0. Pero lo más grave para mí volvió a ser que, por segunda jornada consecutiva, no hubo respuesta ante un cambio táctico del rival. Este no fue contrarrestado por un Deportivo que vivió instaurado en la comodidad del resultado hasta el 2-1. Luego, sí que reaccionó diez minutos, entre el 65 y el 75, pero cuando parecía más cerca el 3-1, llegó el 2-2 y se resquebrajó el equipo.

¿Cuál fue el cambio táctico con que el Numancia revolucionó el partido? La entrada de Alain al descanso provocó situaciones de dos contra uno en la banda derecha del Deportivo y, además, López Garai retiró a un punta más rígido para introducir a otro más móvil. Abría así la llegada de gente por dentro. El mayor ejemplo fue la jugada del segundo gol: centro y llegada del mediocentro desde fuera hacia dentro. Se multiplicó la movilidad por los exteriores del Numancia, allí por donde todos sabemos que se halla la debilidad del Deportivo.

La contestación desde la pizarra fue pasar a Borja Valle a la izquierda y Expósito a la derecha, con Carles Gil en la mediapunta. Pasó a jugar un 1-4-4-1-1, pero una vez más se demostró que defender con más no significa defender mejor. Por un lado, apenas le duraba la pelota, porque por delante ya solo estaba Quique y únicamente Gil era capaz de sostener la posesión. Además, el equipo se encontraba muy lejos de donde quería atacar y su mediocampo había de hacer el doble de esfuerzo. Por eso, el Deportivo volvió al rombo, donde se encuentra más seguro. Entró Bergantiños y, mucho más tarde, Krohn-Dehli en una reacción un poco tardía desde el banquillo.

Es verdad que el partido se pudo resolver en la primera parte, pero por eso duele más el empate, porque lo que podía haber sido una goleada se convirtió en el adiós a dos puntos que espero que no echemos de menos más adelante.