Mosquera se lesiona y el Dépor se replantea volver al mercado

Pedro José Barreiros Pereira
p. barreiros A CORUÑA / LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

GONZALO BARRAL

Es la séptima baja para el sábado, condiciona la posición más castigada, el centro del campo, y lleva al club a analizar la llegada de algún jugador en paro

14 feb 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Con las alarmas disparadas en el Deportivo por el alto número de lesiones musculares, Mosquera se convirtió ayer en la séptima baja para el partido del sábado (16.00 horas, LaLiga 123 TV) contra el Nàstic en Riazor. El mediocentro, que llevaba dos meses sin jugar hasta el partido de Granada, cuando participó 80 minutos, sufre una dolencia de grado 1 (microrrotura o elongación, entre 7 y 21 días de recuperación), y se convierte en la gota que colma el vaso de Carmelo del Pozo.

El coruñés se convierte en la tercera ausencia en el centro del campo, donde salvo sorpresa tampoco estarán Vicente Gómez, Krohn-Dehli ni Pedro Sánchez. Además, cabe recordar que Carles Gil fue traspasado en el mercado de invierno, cuando el club intentó sin éxito la incorporación del japonés Gaku Shibasaki. Tampoco saltarán al césped Carlos Fernández, así como los sancionados Duarte y Nahuel.

Cuando aún no se conocía la lesión de Mosquera, el director deportivo reconocía que se fichará, si la lesión de Krohn-Dehli era de larga duración. Y aún cuestionado por si acudiría al mercado de jugadores en paro en busca de un nuevo Babel, aclaró en un encuentro digital con los lectores de La Voz: «Se están mirando cosas, porque tú tienes que estar en constante movimiento. No solo por lo que te pueda pasar ahora, sino porque a lo mejor puedes tener en dos semanas una lesión de larga duración que te obligue a ir al mercado a buscar jugadores y tienes que tenerlos un poco vistos».

Si no por la gravedad de las dolencias (aunque las del danés o de Vicente Gómez siguen siendo una incógnita), su reiteración en un comienzo de año negro en esta faceta empujarían al club a cubrir la única ficha libre de que dispone. Natxo González se quejó el pasado viernes de no saber cuándo podrá contar con sus jugadores y cada vez los responsables del área deportiva ven más claro acudir a un mercado que, no obstante, creen poco atractivo y en el que los mirlos blancos, ya de por sí escasos en Primera, en Segunda son muy limitados.

Fondo de armario en entredicho

Ni siquiera la baza que ha salvado al Dépor en otras situaciones, como el pasado domingo, cuando esgrimió el potencial de su fondo de armario para doblegar a un rival directo por el ascenso, concede ahora seguridad alguna. El cuadro blanquiazul jugó el último partido muy condicionado por algunas ausencias claves, pero futbolistas menos habituales, entre estos Mosquera, se destacaron para que el rendimiento no se resintiese. El órdago se convirtió en la segunda victoria consecutiva a domicilio de los coruñeses y todo un trampolín para el definitivo asalto a las dos primeras posiciones.

Esta última lesión sorprende en un futbolista que llevaba dos meses sin jugar, pero destacado por todos en cuanto a su alta exigencia en los entrenamientos. Con únicamente Bergantiños y Expósito a disposición para el sábado, muy probablemente llegará la oportunidad de Didier Moreno, o la de Caballo, si el técnico se inclina por la polivalencia del lateral, pero la actual plantilla no ofrece más soluciones. Porque todo indica que la nueva incorporación, si la hay, no llegaría antes de la próxima semana, por lo que el Deportivo tendrá que apañarse como está para zanjar su últimamente irregular rendimiento en Riazor, donde no ha perdido, pero solo ha ganado dos de sus cinco últimos compromisos. Ahora, en una pirueta aún más difícil todavía que la de Granada, aspira a que ni la competición ni las lesiones lo arrojen del terreno conquistado.