Vasilios Lampropoulos, un peso pesado de una Liga histórica

L.Balado

TORRE DE MARATHÓN

reuters

27 jun 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

Vasilios Lampropoulos se formó en la cantera de Olympiacos, una de las grandes academias del fútbol heleno, pero nunca defendió la camiseta del primer equipo. Hoy la apuesta del conjunto de El Pireo por sus jóvenes centrales es firme y exitosa -Dimitris Nikolau del Empoli o Panagiotis Ketsos del Leverkusen son ejemplos-, pero abrirse hueco entonces no era sencillo.

Fue en otro gran equipo del país donde dejó huella. La descomposición del AEK, hundido deportivamente y arrastrado a la tercera división tras entrar en bancarrota en el año 2013 obligó a los atenienses a volver a empezar. Un año más tarde, en su camino de regreso, apareció en el camino el nuevo central del Deportivo que acabaría siendo parte importante en el milagro protagonizado por el equipo. De los infiernos a ganar la Liga en la temporada 2017-2018 siendo titular indiscutible tras recuperarse de una rotura del ligamento cruzado en su rodilla derecha en abril del 2017.

Central fuerte, potente por alto y que prefiere desarrollarse por el costado derecho. Su carácter caliente en ocasiones le ha costado errores de concentración, pero le valió un hueco en el corazón de la grada del AEK, que nunca olvidó el compromiso de uno de los pesos pesados del vestuario en los malos tiempos de la institución. No tuvo el mismo pago la directiva. Diferencias contractuales con los dirigentes acaban ahora con su salida del club rumbo a la Segunda División española a sus 29 años.

Aseguran en Grecia que llega a A Coruña tras haber experimentado una gran mejoría en su juego con los pies, el gran déficit de su carrera y con el objetivo de seguir creciendo. Tiene margen.