Koné y Somma, lesionados, dejaron sus tareas de recuperación para mostrar su cariño al entrenador en una corta sesión de trabajo tras la derrota de Montilivi
04 oct 2019 . Actualizado a las 14:07 h.El Deportivo se ha entrenado esta mañana de viernes en una suave sesión de trabajo marcada más por los gestos que por el trabajo desarrollado. Todas las miradas se han centrado en Anquela, cuyo futuro está en el aire y al que club ya busca sustituto. El entrenador ha saltado al campo acompañado del lesionado David Simón, quien tras la charla grupal con que comenzaron las tareas se ha regresado a los vestuarios.
Pero la imagen de la jornada ha correspondido a Koné y Somma, los otros dos jugadores de baja en la plantilla, quienes no han dudado en salir del vestuario donde estaban acometiendo sus tareas de recuperación para acudir al lugar del césped donde estaban sus compañeros y su entrenador para darle a este un sentido abrazo. El momento habla por sí solo de la precaria situación en que se encuentra el entrenador andaluz, quien incluso podría abandonar su cargo antes del partido del domingo (18.30 horas) contra el Almería en Riazor.
En el vestuario tratan de pasar página del nuevo fiasco del jueves en Montilivi. Álex Bergantiños ha reconocido el nefasto momento del equipo, penúltimo clasificado de Segunda, ha apelado a la unión de todos: «No me gusta cómo está la situación y los máximos responsables somos nosotros por el rendimiento que damos. Pero no ayuda nada estar divididos». Además, ha señalado que la afición es soberana para dar sus opiniones, pero ha apelado a la responsabilidad de todos: «No sé si el domingo tendremos un ambiente hostil. A mí me gustaría que sea al final del partido cuando se juzgue lo que se ha visto».
El mediocentro ha señalado que ve a Anquela con fuerzas para sacar al equipo adelante: «El míster nos transmite que vamos a salir de esta situación y limpiar la mente de la negatividad que tenemos todos ahora. Hay que centrarse en el corto plazo y empezar de cero». Y aún sobre el posible relevo en el banquillo, ha añadido: «No me corresponde a mí hablar del cambio de entrenador. Lo único que está en mis manos es que el equipo esté fresco de cabeza y pueda competir bien».