El entrenador del Deportivo toca los resortes psicológicos en busca de la mejor versión de su plantilla
14 ene 2021 . Actualizado a las 19:38 h.La labor de Rubén de la Barrera no se circunscribe a diseñar en el Dépor un nuevo sistema de juego, habrá que ver si más valiente o dominador que el de Fernando Vázquez, sino que ya desde sus primeras horas como máximo responsable del banquillo deportivista también está tratando de tocar los resortes psicológicos de la plantilla. Así, se le vio especialmente cercano a algunos de sus jugadores. Quizá el que más, José Lara. Al término del entrenamiento, mientras algunos iniciaban los ejercicios de estiramientos previos a regresar a los vestuarios, De la Barrera y el mediapunta protagonizaron una escena que recordó a la que en el 2004 habían tenido el entonces seleccionador Luis Aragonés y una de las estrellas de aquel combinado, José Antonio Reyes.
Con los rostros pegados y ante la mirada sorprendida de algunos compañeros, el entrenador habló al jugador mientras trataba de situarse cara a cara con él. Finalmente, el coruñés acabó agarrando a Lara por el cuello y le habló al oído mientras tapaba con la mano lo que le decía. La anécdota acabó con la sonrisa del futbolista y el golpe en el pecho de De la Barrera tras una confidencia que quedó entre ellos.
En aquella ocasión, la escena entre Aragonés y Reyes había sido grabada por la televisión y hasta se había oído al carismático técnico espetarle al veloz extremo: «Dígale al negro [en referencia a Thierry Henry, compañero de Reyes en el Arsenal] que usted es mejor. Dígaselo de mi parte. Usted es mejor». Luego, el propio Sabio de Hortaleza había aclarado que estas palabras solo pretendían motivar a su jugador. A buen seguro que lo mismo buscará el nuevo entrenador del Dépor con el sevillano, que volverá al equipo tras dos partidos de suspensión en busca de plasmar los buenos augurios que prometía cuando aterrizó cedido en el Deportivo.