Juergen Elitim y William de Camargo recuperan sus mejores versiones en el período crucial de Liga
09 abr 2022 . Actualizado a las 16:34 h.A este Deportivo solo le queda crecer para afrontar el siguiente nivel: ganar el domingo a las doce de la mañana al Bilbao Athletic, aparcar definitivamente la crisis y meter una marcha más en su juego para llegar a la promoción como gran favorito al ascenso. La buena media hora inicial del pasado sábado contra el Majadahonda dejó claro que el camino de mejora blanquiazul deben liderarlo sus referentes de toda la temporada. Desde una alineación en la que se mezclaban habituales y jugadores con un puñado de titularidades en la Liga, las actuaciones de Juergen Elitim y William de Camargo en la primera media hora resultaron decisivas. El extremo sufrió la falta que el colombiano sirvió a la cabeza de Lapeña para subir el 1-0 al marcador. Luego, de nuevo el mediocentro dio a Noel el pase que acabó en el penalti de Casado, que el brasileño transformó con frialdad desde los once metros en el 2-0.
Con una plantilla en la que destacan varios veteranos, el Dépor está cimentando buena parte de sus expectativas en dos jugadores de ficha sub-23. Estas no son sus dos primeras acciones destacadas en las últimas jornadas, pues William viene de sufrir sendos penaltis en los anteriores partidos contra el Celta B y la Cultural, mientras Juergen había recuperado la pelota y asistido a Quiles en el gol que había abierto el marcador contra el cuadro leonés. «Para mí el mediocentro es el jugador de más peso ofensivo del equipo, pero tendría que llegar más al borde del área. Esto favorecería dos aspectos: por un lado, permitiría ver más a menudo su disparo, lo que seguro que le iba a permitir marcar más goles, y, si no, le daría más asistencias. En cualquier caso, sería un jugador mucho más determinante de lo que es ahora», explica Maikel.
Un solo gol de Juergen
Juergen, incorporado en préstamo, pertenece al Watford inglés, aunque venía de jugar con la Ponferradina en Segunda División, donde había disputado 41 partidos, pero no había alcanzado los 2.000 minutos de juego. El secretario técnico del cuadro coruñés, Carlos Rosende, ya manifestó en febrero pasado su confianza en que después de esta campaña siga vistiendo la camiseta deportivista. Hasta ahora su único gol fue en la derrota en Riazor frente al Real Unión, la primera de aquellas tres que acabaron por derrocar al Dépor de la cabeza de la clasificación.
También William llegó a A Coruña cedido, en su caso por parte del Leganés, y, tras un período de adaptación, se está convirtiendo en un jugador decisivo en los planes blanquiazules, aunque le falta continuidad en muchas de sus acciones. Según señala Maikel, el futbolista brasileño no aprovecha todas las condiciones que tiene. «Es potente, habilidoso y con calidad, pero le cuesta asociarse con sus compañeros», explica, antes de reconocer que el punto débil de William radica en la toma de decisiones. «Ambos tienen el potencial, pero ni uno ni el otro han mostrado aún todo el fútbol que llevan en sus botas», añade el exfutbolista, quien anima a ambos a propiciar el impulso que el equipo necesita. «Si dan ese paso que falta en su rendimiento, el Dépor va a ganar mucho», afirma.