Doblega al Mallorca con un gol del debutante Noé Carrillo en los últimos minutos del partido después de un ejercicio de resistencia que desbocó la fiesta de la grada de Riazor
16 dic 2025 . Actualizado a las 22:29 h.El Deportivo se impuso al Mallorca y accedió a los octavos de final de Copa por la puerta grande (1-0). Fue una faena de sudor y brillo. Un solitario gol del fabrilista Noé Carrillo, que debutaba en partido oficial con el primer equipo, dio el pase a un equipo coruñés que recuperó su mejor balance defensivo frente a todo un rival de Primera División.
Tras dar buena cuenta del Sámano y el Sabadell en las rondas anteriores, el cuadro entrenado por Antonio Hidalgo se encariña con una competición en la que no avanzaba hasta este punto desde hace ocho temporadas. Ahora nadie le puede privar de soñar tras una tarde en que Riazor disfrutó como pocas veces le ha tocado hacerlo durante los últimos años. Hacía falta un partido así, con el estadio saltando de alegría junto a sus jugadores, en un momento de preocupación de la temporada, y, sobre todo, un subidón de energía para retomar la buena senda liguera. La receta está aquí.
A la primera parte le costó llegar a las áreas. Al Dépor le sobró la prisa, empeñado en resolver en dos toques y por el medio todos sus ataques. Solo cuando evitó ambas situaciones, metió en aprietos a su rival. Conoció el camino desde el principio. A los cinco minutos, la llegada por banda de Quagliata habilitó a Herrera solo en el área, pero este remató flojo a las manos de Bergstrom. Pero lo cierto es que ni el meta del Mallorca ni Puerto trabajaron mucho en los primeros 45 minutos. Hidalgo cortocircuitó la salida del balón de los baleares, que quedaron pendientes de las acciones individuales de Pablo Torre y la movilidad de Samu Costa para romper las líneas blanquiazules.
Los visitantes pudieron adelantarse en el desorden que rodeó el primer cuarto de hora del partido. Varios rechaces permitieron a Asano tomar la espalda de la defensa deportivista, pero en la carrera y el mano a mano frente a Puerto venció Barcia, que bloqueó su disparo. Pero no finalizó el peligro. En la salida del Dépor, un nuevo robo permitió a Mateu Morey llegar a línea de fondo y que, de nuevo tras varios rechaces, el meta detuviese el remate final del delantero del Mallorca. Con la línea defensiva local desordenada, de nuevo el japonés se plantó ante Puerto, pero cruzó demasiado su remate.
El triple susto duró en el cuerpo del Dépor, que no se estiró hasta después del ecuador del período, pero en un contragolpe claro Mulattieri abusó de individualismo y la jugada acabó quedando en nada. Ya poco antes del descanso, un disparo desde fuera del área de Llabrés que se fue a córner tras desviarlo Puerto con la punta de los dedos. Y la contestación inmediata del Dépor llegó en un buen centro de Quagliata, al que Mella llegaba por sorpresa al área, pero el canterano no afinó su cabezazo cuando estaba solo.
El Deportivo saludó el inicio del segundo tiempo con sus dos mejores ocasiones. Tras un córner en una llegada de Noubi a línea de fondo, Villares se sacó un espectacular chut a la media vuelta desde la frontal que se estrelló cerca de la cruceta de Bergstrom. Y, sin que el balón abandonase las cercanías del área visitante, Mulattieri cabeceó desviado otro buen centro de Quagliata. El Mallorca contestó por medio de Mateu Morey, pero Puerto detuvo seguro su centro chut.
Los cambios mostraron la ambición de Hidalgo, pues Luismi Cruz y Mario Soriano entraron al campo, pero el primero que avisó fue el Mallorca. Llabrés centró y Abdón Prats cabeceó fuera en inmejorable posición. Todo seguía por decidirse, pero el balón ya era visitante, aunque el Deportivo cada vez era más peligroso a la contra. Riazor empujaba a sus colores y la aparición de Bil Nsongo fue jaleada desde la grada como si de Yeremay se tratase.
Pero fue Maffeo el que, tras un centro al segundo palo, estrelló su remate en el larguero. En el contragolpe deportivista posterior, con Mario Soriano llegando al área, Bil chutó a bocajarro, pero también el travesaño escupió el balón. El partido entraba en el cuarto de hora final con los dos equipos brindando llegadas y ocasiones, mientras se mantenía la emoción en el marcador.
A diez minutos del final, Noé Carrillo debutó como pareja de Gragera en el mediocentro. Fue un cambio vital en la suerte de su equipo, pues entró con el pie derecho. El fabrilista no solo marcó el 1-0 en un balón muerto en el área. Había llevado el balón al área rival en el ataque que culminó con el centro de Luismi Cruz, el cabezazo al palo de Bil y el remate a la red del mediocentro debutante, que lo festejó enfervorizado. No era para menos. El Dépor ya se encuentra en los octavos de Copa.
Ficha técnica
Deportivo, 1: Eric Puerto; Noubi, Arnau Comas, Barcia, Quagliata; Gragera, Villares (Noé Carrillo, min 79); Mella (Luismi Cruz, min 61), Herrera (Bil Nsongo, min 68), Rubén López (Mario Soriano, min 61); y Mulattieri (Stoichkov, min 68).
Mallorca, 0: Bergstrom; Mateu Morey (Salhi, min 81), David López (Valjent, min 61), Kumbulla, Toni Lato (Maffeo, min 71); Samu Costa, Antonio Sánchez; Asano, Pablo Torre (Darder, min 71), Llabrés (Virgili, min 81); y Abdón Prats.
Gol: 1-0, min 85: Noé Carrillo.
Árbitro: Ortiz Arias (Comité madrileño). Amonestó a Barcia (min 92).