Un delincuente visitaba a los enfermos graves de los centros sanitarios y les robaba las tarjetas de crédito, con las que logró apropiarse de casi 17.000 euros
19 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Los hospitales tienen guardias de seguridad pero no son lugares seguros para los pacientes. Los robos en los centros hospitalarios son bastante frecuentes a pesar de los esfuerzos para evitarlos.
Ayer fue condenado a 21 meses de prisión el ladrón de los hospitales, José Antonio Rodríguez Hombre. Estaba acusado de estafa y apropiación indebida e inicialmente el ministerio fiscal solicitó que fuese condenado a tres años de cárcel. Pero José Antonio aceptó una pena menor, de 21 meses, conformándose con la petición fiscal. Por eso no llegó a celebrarse el juicio en el que estaban citados numerosos miembros de las Fuerzas de Seguridad del Estado que realizaron una ardua tarea de investigación para detener a este individuo nacido en 1967 y cuyo último domicilio conocido consta en Ortigueira. El caso se dirimió en el juzgado de lo penal número 1 de Vigo. La jueza aceptó como atenuante la dilación en el procedimiento, ya que los hechos sucedieron en el año 2004 y en anteriores ocasiones hubo que suspender el juicio porque el acusado no se presentó. No era fácil que se presentase porque estaba encarcelado en Madrid por otros delitos cometidos en aquella comunidad.
El 1 de agosto del año 2004 un motorista de Ponteareas que conducía una potente Kawasaki sufrió un grave accidente que motivó su ingreso en el Hospital do Meixoeiro de Vigo. Aprovechando un descuido, José Antonio Rodríguez Hombre entró en su habitación y le sustrajo la tarjeta de crédito.
Unos días después, el 20 de agosto del 2004, el delincuentes hizo otra de sus visitas hospitalarias. Esta vez la víctima fue una mujer que estaba ingresada en el Hospital Clínico de Santiago. También le sustrajo el dinero de plástico.
El intruso elegía bien a las víctimas, puesto que seleccionaba a las que estaba muy graves y cuya estancia hospitalaria se preveía larga. Así que el motorista gravemente herido no sospechó nada cuando salió del hospital vigués el 24 de agosto. Al revisar su cuenta corriente se dio cuenta de que se la habían vaciado. Lo mismo le pasó a la paciente del hospital de Santiago.
José Antonio Rodríguez Hombre realizó numerosas compras y en total gastó 7.952 euros y 8.985 de las cuentas bancarias de su víctimas en el BBVA y en Caixanova. Las sospechas sobre este hombre, descrito como grueso y desaliñado, comenzaron cuando, en su huida por España adelante con una Citroën Evasión repostó en una gasolinera de Santiago. El delincuente pagó el combustible con la tarjeta de la mujer ingresada en el hospital santiagués y el empleado se dio cuenta. José Antonio Rodríguez le arrebató el tique y se fugó y la Guardia Civil emprendió el rastreo.
Para despistar a las fuerzas de seguridad se cambió el domicilio a Gerona, aunque no llegó a inscribirse en esta ciudad. Finalmente fue detenido. En su historial cuenta con tres antecedentes por delitos contra el patrimonio.