Los bumerán de Caballero

VIGO

Concierto de año nuevo, túnel del AVE en abril, pleno empleo y ahora plaza de España pasan de promesas a reproches al alcalde

09 ene 2011 . Actualizado a las 02:00 h.

A cualquier vigués le importará poco si el auditorio en lugar del 1 de enero, con un concierto de Año Nuevo, se inaugura en primavera con un repertorio de Vivaldi. O si la comida popular con la que el alcalde prometió convidar a toda la ciudadanía para celebrar la finalización de los túneles del AVE, en lugar de se celebrarse en abril, como anunció, se pasa a septiembre. Importa mucho más que Vigo alcance en mayo el pleno empleo, como él se comprometió; o que el tren rápido llegue por primera vez a la ciudad «media hora antes que a A Coruña», Abel Caballero dixit; o que se abriese en este mandato la biblioteca pública; o que el puente de Rande estuviese desde hace dos años en obras, o que la nueva depuradora afrontase su recta final...

El caso es que vitales o intrascendentes, Caballero ha acompañado todas esas promesas y muchas más con fecha de ejecución, algunas veces de forma reiterada e incluso vehemente. Ahora matiza con piruetas dialécticas su responsabilidad respecto a sus propias promesas, culpando a los demás de los contratiempos que él no midió, o tachando de antivigués a todo el que le recuerda sus incumplimientos. Entre ellos y en el listado de sus proyectos controvertidos, el regidor lleva camino de sumar definitivamente otro gatillazo, el de la construcción de los cinco edificios que él defendió como su obra emblemática para Vigo y que a estas alturas tendrían que haber cambiado la fisonomía de la Plaza de España. Como todas las circunstancias suelen aliarse en contra de las promesas con fecha de ejecución que hace Caballero, a la promotora de la obra se le pinchó la burbuja y además de no conseguir unos 50 millones de los 250 en los que valoró el proyecto, entró en proceso preconcursal de acreedores. Las megaconstrucciones que dibujó el actual edil de Urbanismo, José Mariño, cuando junto a Ventura Pérez Mariño, se oponía al cambio de plaza de España, forman parte ya del listado de obras congeladas de la promotora Bruesa en toda España y suma además más inercia a todos los bumerán que ha lanzado Caballero y que empiezan a dar la vuelta.