El PP advierte a Caballero que ya no hay marcha atrás con el nuevo hospital

María Jesús Fuente Decimavilla
María Jesús Fuente VIGO / LA VOZ

VIGO

Compara la oposición a esta infraestructura con la que hubo en su día por el puente de Rande

14 sep 2013 . Actualizado a las 23:28 h.

El PP del Concello de Vigo advierte a Caballero que ya no hay marcha atrás en las obras del nuevo hospital por mucho que insista en sus críticas. «Ahora ya no caben excusas para obstaculizar el nuevo hospital público, la mayor obra social de las últimas décadas en Vigo», explica el portavoz del grupo municipal del PP, José Manuel Figueroa, quien defiende las instalaciones de los que, como el alcalde, las tachan de privadas.

Para el político popular «es impensable hablar de privatización de la sanidad con este hospital porque la asistencia será cien por cien pública».

Entiende que los vigueses y los residentes en otros municipios del área de Vigo son conscientes del esfuerzo que se está haciendo para que la obra llegue a su final y que el nuevo hospital pueda funcionar cuanto antes. Se trata, dice, de garantizar la prestación sanitaria del área viguesa.

«Cualquiera que pase por las inmediaciones de la obra se dará cuenta de su magnitud, cinco veces mayor que el actual hospital, cuyas instalaciones se vuelven obsoletas con el paso del tiempo. Es algo visible, no una maqueta como lo que hicieron otros», añade Figueroa, quien insiste en que el nuevo hospital de Beade es la obra pública más importante en Vigo desde que se construyó el puente de Rande. «¿Dónde están ahora aquellos que se oponían al puente? Hoy en día nadie lo cuestiona y con el hospital ocurrirá lo mismo.», advierte.

El portavoz municipal del PP sale así al paso de las críticas que se han vertido también por los problemas que han tenido las obras y su paralización. De hecho, y una vez resueltas las trabas, anteayer el presidente de la Xunta Alberto Núñez Feijoo admitió un nuevo plazo en la apertura del centro, que ahora se fija para e 2016, en lugar de finales del 2014 como estaba previsto inicialmente.

Con estas nuevas expectativas y solucionado el problema de la financiación «los del no permanente a todo tienen que recapacitar; el hospital estará en servicio y los ciudadanos serán conscientes de que es una infraestructura absolutamente necesaria.», concluye Figueroa.