Caballero supera a Fraga: el 100 % de los vigueses dicen conocerlo

Ángel Paniagua Pérez
Ángel Paniagua VIGO / LA VOZ

VIGO

Oscar Vázquez

Los votantes de todos los partidos y hasta los abstencionistas aprueban al alcalde

09 feb 2019 . Actualizado a las 08:01 h.

Un mes antes de perder la presidencia de la Xunta, a Manuel Fraga decían conocerlo el 99,7 % de los gallegos. Corría mayo del 2005 y el histórico fundador de la derecha española llevaba a sus espaldas 50 años en política, los últimos quince como omnipresente jefe del Gobierno gallego. Aun así, al archiconocido Fraga se le resistía un 0,3 % de la ciudadanía, según la encuesta que hizo entonces Sondaxe para La Voz de Galicia y que vaticinó que la derecha cedería el poder en Galicia.

Abel Caballero se enfrentó a Manuel Fraga en las urnas en 1997 y la derrota del primero fue sonada, que hasta fue superado por el BNG de Beiras. Casi veinte años después, Caballero puede presumir de haber ganado a Fraga y a Beiras en un aspecto que resulta crucial en la batalla política: al alcalde de Vigo lo conoce todo el mundo. La encuesta que ha elaborado Sondaxe para La Voz sobre el escenario político para las elecciones municipales de mayo revela que el 100 % de los encuestados dicen que conocen a Abel Caballero. Todos.

El ponteareano es alcalde de Vigo desde hace doce años. Si revalida su puesto en los comicios de mayo, adelantará a Manoel Soto y se convertirá en el regidor más duradero de la historia de Vigo. Afronta ese reto con un grado de conocimiento total, del que no gozó ni Fraga tras medio siglo en política. Ni siquiera el pontevedrés Miguel Anxo Fernández Lores lo consigue, tras veinte años en el poder. Lo conocen el 96,8 % de los electores de Pontevedra, una ciudad que tiene cuatro veces menos habitantes que Vigo. La situación solo es comparable a la que atravesaba A Coruña en el año 2002, cuando el 100 % de los encuestados declararon conocer a Francisco Vázquez, si bien es cierto que este ya llevaba entonces 19 años como alcalde.

La falta de conocimiento fue uno de los mayores problemas que sufrió Elena Muñoz en las elecciones del 2015. Alberto Núñez Feijoo la designó candidata cuando solo faltaban cuatro meses para las elecciones locales y solo el 34 % decían saber quién era aquella mujer que hasta entonces se sentaba en el Consello de la Xunta. Ahora son el 61 %. Ya es el doble, Muñoz sigue muy lejos de Caballero en notoriedad. El líder de Marea de Vigo, Rubén Pérez, está en el 37 % y es el único que baja (casi siete puntos) con respecto al año pasado.

El fenómeno Caballero es único no solo por su grado de conocimiento, sino por su grado de aceptación. El alcalde obtiene un 7,25 como nota media y es el único alcalde gallego que entra en el notable. Pero no solo es eso. La encuesta de Sondaxe separa a los entrevistados según el voto de las anteriores elecciones, según dónde viven, según su edad y según su ocupación. Todos los candidatos tienen un mayor grado de aceptación entre determinados colectivos o barrios. El caso de Caballero es inaudito porque todos los colectivos de todas las variables le aprueban.

Es cierto que las trabajadoras del hogar y los jubilados son los dos colectivos que más le sonríen (le dan un 8,6 y un 7,8 sobre 10, respectivamente) y que a más edad, más afinidad; pero también lo es que los parados le dan un 7,1 y los estudiantes un 6,6. No hay colectivo que se le resista.

Incluso entre las personas que simpatizan por otras fuerzas políticas. Los votantes del PP lo dejan al borde del 6, mientras que para los electores de Marea de Vigo y del BNG merece más de un 5,5. Hasta las personas que en el 2015 prefirieron no ir a votar le dan un 6,5. Y los ciudadanos que hace cuatro años votaron en blanco, un tradicional voto de castigo, le dan un 5,5.