Fallece Enrique Romasanta, el vecino que sentó en el banquillo a los responsables del relleno de Bouzas

La Voz VIGO

VIGO

M. MORALEJO

Mantuvo una cruzada contra el Puerto de Vigo desde distintas asociaciones

31 ago 2022 . Actualizado a las 10:49 h.

Enrique Romasanta Rodríguez falleció el pasado sábado a los 67 años. Vecino de Bouzas, su nombre quedará ligado al polémico relleno (más de medio millón de metros cuadrados ganados al mar) que se llevó a cabo en la villa marinera de Vigo a finales de los años 80 y comienzos de los 90. Como vicepresidente de la asociación vecinal, impulsó una denuncia en 1991 contra la entonces presidenta del Puerto (y años más tarde ministra de Medio Ambiente) Elena Espinosa, su antecesor en el cargo José Martínez Torea y el ingeniero Joaquín Colunga. Los tres se sentaron en el banquillo acusados de delito ecológico en los aterramientos. La Fiscalía llegó a solicitar para ellos tres meses de arresto mayor y dos millones de pesetas de multa por vertidos incontrolados, pero fueron absueltos en 1994 al considerar la sentencia que no hubo negligencia en su actuación.

Romasanta, que llegó a ser detenido por aquellas obras y que acabó enfrentado a la directiva de la asociación vecinal, convirtió su vida en una cruzada contra el Puerto de Vigo. Fue una especie de Quijote que no paraba de pelearse contra la administración y de presentar denuncias por todo tipo de actuaciones y contra todos los presidentes que se fueron sucediendo en la Autoridad Portuaria, como Juan Corral, Abel Caballero o Corina Porro. Cuando no se trataba del plan especial portuario arremetía contra concesiones que consideraba fraudulentas como la de los terrenos de la antigua Casa Mar, o llegaba a cruzar en barco la ría para sumarse a las movilizaciones contra el puerto deportivo de Massó, en Cangas.

Ejerció de pescador de forma intermitente para ganarse el sustento y formó parte también del colectivo A ría non se vende, en el que ejerció de portavoz. La presencia de Enrique Romasanta fue habitual en movilizaciones y en los registros de juzgados y ayuntamientos. En 1995 se sumó, como número 3, a lista encabezada por el exconselleiro Pablo Padín a las elecciones municipales en Vigo. Aquella aventura política se llamaba PIE y duró más bien poco.

Su cuerpo será incinerado mañana a las seis de la tarde en el tanatorio de Emorvisa, en Pereiró.