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Esta joven forma parte del equipo de seguridad de la sala Queen de Mos
26 mar 2023 . Actualizado a las 20:58 h.En Galicia apenas hay mujeres en los servicios de seguridad de las discotecas. De ahí la sorpresa que muchas clientas de la emblemática sala Queen de Mos expresan abiertamente cuando llegan al local y ven que es Gema Lago Lago quien está custodiando la portería. «¡Hala, qué guay! ¿Qué hay que hacer para formarse y ser como tú?», le preguntan muchas mientras les chequea las entradas de acceso al local.
«Soy una más del equipo de seguridad, pero mujer», afirma esta profesional de 23 años.
Pese a su juventud, confiesa que solo frecuenta las discotecas para trabajar. «Yo llevo una vida muy sana, con rutinas concretas. No bebo alcohol y he de dormir ocho horas», explica la portera de discoteca. Además, es entrenadora del equipo de rugbi universitario de Pontevedra y coach de crossfit, un sistema de entrenamiento de fuerza y acondicionamiento basado en ejercicios funcionales. «Prefiero quedar con mis amigos para tomar algo de tarde y a la discoteca solo voy a trabajar», reconoce.Gema ha conseguido hacerse sitio en medio de un montón de hombres. Es muy difícil encontrarse con una mujer velando por la tranquilidad de la fiesta en un local nocturno. «De hecho, yo no conozco personalmente a ninguna otra», indica, aunque sí hay en Vigo e incluso en la propia plantilla de la discoteca, pese a que su compañera está de baja temporal.
La puerta se va abriendo con pioneras que dan un paso al frente como ella. En la última convocatoria para obtener el carné de control de acceso de la Academia Galega de Seguridade Pública, que fue en febrero, había un total de 55 inscritos de los que 13 eran mujeres, según el registro oficial que publica la Xunta.
Ella trabajaba antes como auxiliar en un salón de apuestas y en diciembre se sacó el curso. «Empecé trabajando en un gimnasio, pero buscaba una salida laboral y estabilidad por lo que me apunté a las pruebas en A Estrada», afirma. La recompensa no se hizo esperar. «Eché el currículo en varias empresas por probar suerte. Pensé que por ser mujer iba a tardar más en conseguir un empleo, pero me llamaron de Queen al día siguiente y aquí estoy», recuerda la flamante portera de una de las salas veterana del área de Vigo que cumple treinta años de actividad, siete más que ella.
Compañerismo
«Desde el primer día me sentí superarropada por mis compañeros. Hago exactamente el mismo trabajo que todos ellos, pero sí que notamos que a las chicas les gusta ver a una mujer en la puerta y en sala», afirma. Su experiencia le ha permitido notar cómo «muchas mujeres se sienten más cómodas sabiendo que también hay porteras y no solo por romper la brecha, sino por la confianza».
Al acompañarla en una noche de trabajo se confirma la sorpresa de muchos clientes por sus reacciones. «Todos se sorprenden por igual, muchas chicas me dan la enhorabuena, pero hasta ahora siempre he sentido el mismo respeto que hacia mis compañeros», dice.
Siempre hay una excepción. «Durante un incidente, un chico me dijo que me callara y que quería hablar con algún hombre, pero su problema no fue más allá», explica. Sobre las cualidades para ser una buena profesional en el sector, Gema López considera que hay que buscar el equilibrio entre cuerpo y mente. «Es importante tener buena forma física y reflejos para reaccionar pronto, pero, sobretodo, una paciencia infinita. La gente que sale de fiesta y bebe suele sobrepasarse, por lo que es prioritario tener los límites muy claros y, a muchos, recordárselos muchas veces», advierte.
Entrena a diario para mantenerse en forma, además de dar clases. Amante de los deportes desde pequeña, afirma que comenzó a jugar al rugbi con catorce años. «Entreno hora y media como mínimo tres días a la semana. Alterno correr 10 kilómetros un día, con la natación y el crossfit», dice esta deportista que también trabaja como camarera para poder completar el sueldo de los fines de semana.
«Me encanta mi trabajo por el trato directo con la gente y el compañerismo que hay. Somos y funcionamos en equipo, tanto los del grupo de seguridad como el resto del personal de la sala y eso es muy importante», valora esta viguesa.