El libro mejor editado del año se gestó en Vigo

Begoña Rodríguez Sotelino
begoña r. sotelino VIGO / LA VOZ

VIGO

M.MORALEJO

Teresa Zataraín es la fundadora de Creotz, empresa que acaba de recibir el Premio Nacional de Edición del Ministerio de Cultura por el libro «Bestiarium», de Dulce María Loynaz, ilustrado por Mo Gutiérrez

12 jun 2024 . Actualizado a las 16:24 h.

Tras varias décadas en el sector de la comunicación, la periodista Teresa Zataraín se decidió a dar un salto que llevaba años ensayando mentalmente. Como lectora, el mundo de la edición le parecía un maravilloso e idílico espacio de trabajo que, aunque asegura que lo es y le encanta, reconoce también que no sabía que era tan duro. Pelear tus obras en un país con 700 editoriales en el que el año pasado se publicaron alrededor de 80.000 títulos no debe ser nada fácil. Y menos desde una pequeña editorial con sede en Vigo, llamada Creotz, que publica libros seleccionados con un criterio siempre exquisito, ya sea por la estética, por lo especial de las propuestas, por el empeño en redescubrir autores, o por todo a la vez.

Zataraín fundó Creotz en el 2012 pero tuvo un arranque lento que fue cogiendo velocidad poco a poco, aunque nunca con el objetivo de romper la barrera del sonido sino de lo ordinario. Los libros de Creotz son siempre singulares y el último, Bestiarium, más aún, ya que acaba de recibir el Premio del Ministerio de Cultura a los Mejores Libros Editados en el 2023 en el apartado de libro infantil y juvenil, donde quedó tercero entre 186 propuestas de las cuales fueron seleccionadas solo quince.

Bestiarum es una joya por varias razones que explica la periodista nacida en Santander que lleva casi toda su vida en Vigo. La obra rescata los poemas juveniles de la poeta cubana Dulce María Loynaz, que se creían perdidos: «Es un libro lleno de ingenio», destaca la editora y autora de la introducción en la que cuenta que Loynaz escribió esos textos a los 18 años, cuando terminaba el bachiller por libre. «Eran tiempos difíciles para las mujeres en cuanto al acceso a la educación y casi imposible en estudios superiores, aunque ella pudo doctorarse en Derecho», relata.

«Se presentaba al examen de Historia Natural de bachillerato, su favorita, pero nadie le dijo que tenía que presentar tres cuadernos, cada uno con 20 especies (del reino animal, vegetal y mineral) y la suspendieron. A modo de venganza, escribió otros tres, pero en verso, aunque nunca llegó a presentarlos porque un catedrático amigo de la familia los interceptó antes, ya que la hubieran vuelto a suspender al poder considerarse una burla o una falta de respeto al tribunal», cuenta la editora.

Se guardaron en un cajón durante 50 años y cuando ella los encontró, «que ya era Premio Nacional y una grandísima escritora, lo mostró con simpatía a sus amigos críticos y vieron que era una obra genial de juventud con una ironía, frescura y desenfado juvenil que nunca volvió a tener», señala Zataraín.

Pero el hallazgo quedó mermado porque de los tres cuadernos solo se pudo rescatar uno, ya que con buena parte de las páginas las polillas habían hecho un banquete. Creotz ha publicado por primera vez fuera de Cuba esta obra en la que hay 21 poemas y 21 ilustraciones sobre 21 animales, «pero la lección décima está vacía, es un guiño relacionado con la voracidad del insecto que devoró uno de los capítulos del cuaderno original», apunta.

La artista Mo Gutiérrez Serna se ha encargado de la ilustración de esta obra y también de la que vino después: Dulce herbario, que da continuidad a los cuadernos perdidos con la propuesta que la responsable de Creotz le hizo a Juan Kruz Igerabide, escritor Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil al que planteó reimaginar el herbario perdido, «es un libro hermano lleno de talento, mezclando prosa y verso con criterio botánico asociado con atributos de la personalidad de Dulce, que curiosamente tenía raíces vascas y ahí conectan».

Tras el subidón del premio, que no tiene dotación económica pero se compensa con una montaña de prestigio, el proyecto se cerraría con el tercer cuaderno perdido, el de los minerales que también se comieron las polillas, que está en vías de desarrollo, siguiendo la misma línea de diseño y contando con la misma ilustradora para darle una unidad a la trilogía. En todo ello, Zataraín destaca el papel fundamental de la diseñadora gráfica Cristina Vergara a la hora de dar estilo al conjunto.

Nueva colección de autoras: «Ellas vuelan»

El Ministerio de Cultura concede los Premios a los Libros Mejor Editados con el fin de reconocer y estimular la labor de las editoriales en la edición de libros y obras. Suponen un gran reconocimiento y prestigio a su trabajo y conllevan un extra de difusión, ya que los premiados serán expuestos en las ferias internacionales del Libro Liber, Frankfurt y Leipzig. La editorial Creotz comenzó enfocada al lector menudo y la poesía, pero actualmente tiene entre los 22 títulos de su catálogo obras para adultos, prosa y otras joyas, desde las memorias inéditas de Jella Lepman a la nueva colección de autoras: Ellas Vuelan.