El equipo de voleibol, con una filosofía clara, inicia el sábado la liga
03 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Club Vigo de voleibol comienza este sábado una nueva temporada en Superliga 2, y lo hace con dos premisas claras que definen su plantilla: cantera y juventud. De la mano de Diego Taboada, un entrenador que se ha caracterizado a lo largo de su trayectoria por esa apuesta, el club da continuidad al proyecto que comenzaron juntos el curso pasado. «No hubo que convencerme nada para seguir. Las dos partes estábamos muy contentas y fue instantáneo», cuenta el técnico que llegó desde el San Sadurniño en el verano del 2023.
Iván Sienes, el capitán, es el jugador más veterano de la plantilla, a sus 25 años, y la juventud va a ser un factor determinante, sobre todo en los inicios. «Tenemos un equipo jovencito, en el que la mayoría son júnior», introduce Taboada. Y añade que están trabajando con un grupo numeroso, de 16 jugadores, habiendo sumado juveniles. «Entrenamos muy bien, pero a la hora de competir, cuesta un poco más por la edad», advierte.
A lo largo de la pretemporada, han ido de menos a más en los partidos y aunque han perdido, cuenta que ha sido «con marcadores muy igualados y haciendo muchos cambios», sin jugar siempre con el equipo titular. «Estoy muy contento con el trabajo, pero necesitamos poder plasmarlo en la cancha para poder llegar a la victoria», asume. Y no va a ser fácil en este arranque, sumadas estas circunstancias al calendario que les aguarda. «Recibimos al Boiro, que tiene muy buen equipo, y visitamos al Arona, que va a ser uno de los que estén arriba y es una de las canchas difíciles de jugar», plantea.
A las dificultades se suman las lesiones de dos jugadores importantes del curso pasado, Pau Mena y Pau Delós. «Esperaremos a ver si se puede recuperar, pero no está claro, porque son problemas de hombro y no es fácil», detalla. En cualquier caso, intentarán «competir lo máximo posible» para sacar adelante alguno de los dos primeros compromisos, sabiendo que no va a ser nada sencillo. En el club son conscientes de que va a haber que «tener paciencia» si los resultados no llegan de inicio.
Ante este escenario, el objetivo que se marcan es la permanencia un año más en la segunda categoría del volei español. «Pensar otra cosa sería una locura. Después, intentaremos luchar lo máximo que se pueda, pero también hay que entender que estamos en el grupo más duro de los tres con diferencia, y que si ya el año pasado fue complicado, este, mucho más», insiste. Así, pide a la afición «que se acerque al pabellón a animar cuanto puedan y hacer que el equipo suba» y, sobre todo, que les den tiempo.
Desde el primer momento, en la confección de esta plantilla se tuvo claro que querían un proyecto de cantera y que aspira a tener cierta continuidad. «Los nuevos son gente joven que viene a estudiar a Vigo, con la idea de poder contar con ellos durante unos años», señala Diego Taboada, que recuerda que ni son un club que se pueda permitir fichajes estrella ni tampoco es lo que persiguen. «El año pasado, comenzamos a hacer un trabajo de cantera, con gente joven, para tratar de hacer un grupo estable que entrene bien y en el momento que funcione, apostar por la competitividad», profundiza.
Estabilizar el grupo
La prioridad que marca ahora mismo es «que el grupo se estabilice, incidiendo en que han tenido que lidiar con el problema de que tras hacer una buena temporada, les llevaban a muchos jugadores. «Cada año, el equipo era diferente. Ahora, apostamos por gente de aquí o que venga a estudiar en la Universidad un tiempo», recalca.
Siguen del curso pasado, aparte de Sienes y los dos Paus, Guillermo Salmerón, Aarón Molares y Carlos López, suben de manera definitiva los canteranos José Guantes, Gabriel Carrillo, Ángel Sánchez y Migue Surís y han llegado nuevos Ernesto Gómez, Issac Paches, Joan Hermida, Mateo Prado, Alberto Yáñez, Xoel Hermida y Hugo Vilariño.
Taboada subraya que la filosofía de cantera no le es ajena, sino que la ha desarrollado a lo largo de su experiencia en los banquillos y es un reto que le gusta. «Es algo que entiendo y he trabajado mucho. No es fácil tener esa paciencia y el foco en un objetivo claro, pero confío mucho tanto en el club como en el equipo», dice desde la convicción de que «con el tiempo, se va a hacer una plantilla muy buena».
Su periplo comienza este sábado frente a un Boiro sobre el que incide en que aparte de haberse reforzado muy bien, recuperan a jugadores importantes que estaban lesionados. También destaca que cuentan con Martín Casais, «un jugador de primer nivel nacional», y que son «un equipo al que es difícil jugarle». Buscarán la primera sorpresa.