Una internacional colombiana para el Hockey Ponteareas

VIGO

CEDIDA

Majo Giraldo es la veterana del equipo de Portu, en el que asume un rol clave

08 nov 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

María José Giraldo, Majo ((Manizales, Colomnia, 1993), es uno de los refuerzos para esta temporada del Hockey Ponteareas, equipo que repite en OK Plata de hockey patines. Pero no uno cualquiera. La portera colombiana es internacional con su país, tiene varios mundiales a sus espaldas y llega al equipo a sus 30 años, cuando ya ve cerca la retirada y una de sus motivaciones es enseñar y transmitir a las más jóvenes. Desde esa filosofía la convenció para fichar su técnico y alma del club, José Álvarez, Portu.

La llegada de la deportista a España se remonta al 2021, cuando aterrizó en Bembibre, donde permaneció tres temporadas, las dos primeras, en Plata, y luego, en la máxima categoría. A partir de ahí, ella empezó a notar que era momento de «bajar la intensidad, porque la idea es ir dando pasos hacia la retirada», confiesa. Y ahí también encajaba a la perfección lo que Portu le proponía para esta temporada.

El técnico y la todavía jugadora se conocen hace tiempo a base de haberse enfrentado y también de que él tiene relación con el antiguo entrenador de Giraldo en el club leonés. «Conocía el proyecto que tiene, que es muy bonito, tratando e incluir al pueblo de Ponteareas. Y decidí hacer ese cambio y seguir con él, darle una mano para motivar a los pequeños a conocer este deporte», recalca.

La internacional colombiana habla del proyecto del Hockey Ponteareas como «una propuesta a largo plazo donde se busca incentivar» esta disciplina. Y desde un planteamiento con el que se siente muy cómoda. «Vengo de clubes pequeños en Colombia donde el hockey es, más que todo, una pasión. Es una afición, pero que se vive intensamente, en un ambiente familiar, tratando de disfrutar», desgrana.

Por el momento, ella sigue viviendo en Bembibre, pero está a caballo entre esa localidad y Ponteareas. «Vengo los viernes para poder entrar y reunirme con el equipo y desplazarme, porque allí tengo mi trabajo», detalla. Aunque es duro hacerse tantos kilómetros toda la semana, lo lleva bien con el apoyo del club y de su pareja, que vive en León. «Vamos tirando», sintetiza.

La experiencia con el equipo está siendo muy positiva. «Soy la más veterana de un equipo muy joven. Tenemos, por ejemplo, una chica alemana de 16 años y una argentina de 18 o 19. Vienen con muchas ganas de aprender y energías renovadas para darle ese toque de entusiasmo al equipo», desgrana. Ella, aunque sin vocación de entrenadora, sí tiene afán de contribuir a la formación de las nuevas generaciones. «Pienso que puedo aportar un poquito de los conocimientos que adquirí en estos años. Intento transmitir y dar ejemplo a las niñas de una manera más visual para que puedan ir asimilando y superándose», razona.

El equipo logró el pasado fin de semana su primer punto de la temporada. «Es importante, porque al ser el equipo nuevo y tan joven, la idea de Portu es ir sumando poco a poco y este empate valida lo que se está haciendo», afirma. Ella se siente cómoda en la portería, «sin imponer, sino intentando escuchar y hacerlas sentir seguras» de tenerla «en el arco». «Intento darles seguridad para arriesgar y seguir creciendo», añade.

Geóloga afincada en Bembibre con cinco mundiales a sus espaldas

Giraldo explica que en su país, el hockey tampoco es un deporte que esté especialmente extendido, pero subraya que donde se practica, se hace con esa pasión que a ella le mueve cuando se trata de esta disciplina. «En Colombia, está muy sectorizado. Son pocas las regiones donde se practica, pero en esos sitios, se vive mucho», comenta.

En su caso, comenzó por su hermano pequeño y a una edad que considera tardía y que no es capaz de recordar con exactitud, pero que sitúa en torno a los quince años. «Yo iba a clases de patinaje de velocidad y lo veía a él feliz, disfrutando muchísimo con el hockey. Así que me animé a probarlo», dice esta deportista que antes había probado baloncesto y natación, que admite que no le llamaban la atención lo suficiente. Tanto ella como su hermano terminaron «enganchados», dice, y ahora él juega en Italia, mientras ella, que ha participado en cinco mundiales —el último, este septiembre—, lo hace en España.

La oportunidad de cruzar el charco le surgió cuando la llamaron del APG Bembibre hace tres años. «También querían iniciar un proyecto joven en la OK Plata y decidí aventurarme y dar el salto», recuerda. De ahí pasó al Bembibre Hockey Club y, entre medias, conoció a su pareja. «M i idea es hacer vida en España. Por él tomé la decisión de quedarme», cuenta esta geóloga que mientras tramita la homologación del título, trabaja en una empresa de placas solares.