«El bullicio y las prisas durante las campanadas aumentan el riesgo de atragantamiento»

La Voz VIGO / LA VOZ

VIGO

J. M. CASAL

La doctora de Vigo Belén Moliner ofrece consejos para tomar las uvas de Nochevieja, como conocer la maniobra de Heimlich

31 dic 2024 . Actualizado a las 01:25 h.

La prevención de atragantamientos y asfixias accidentales es crucial para evitar tragedias en la entrada del nuevo año. En las celebraciones de Nochevieja, la ingesta de las tradicionales uvas pueden ser muy peligrosas. Lo advierten desde el Instituto de Rehabilitación Neurológica del Hospital Vithas Vigo, que recomienda saber identificar y actuar rápidamente en estas situaciones, así como conocer las maniobras de primeros auxilios necesarias.

En el 2023, se registraron más de 3.600 fallecimientos relacionados con ahogamientos accidentales, incluidos los atragantamientos, superando los 3.546 del 2022. De ahí que la prevención sea especialmente recomendada en eventos festivos con los de fin de año. Belén Moliner, directora médica del hospital vigués subraya la importancia de la prevención y la actuación rápida para evitar muertes y secuelas neurológicas graves. «El bullicio y las prisas durante las campanadas aumentan el riesgo de atragantamiento. No acumular uvas en la boca o evitar hablar mientras se mastican puede hacer una gran diferencia», comenta la doctora.

El consumo de uvas en Fin de Año es crítico debido a su tamaño, textura y la prisa en su consumo. Se recomienda prestar especial atención a los más vulnerables, como niños pequeños y personas mayores, asegurando que la fruta esté adecuadamente preparada y supervisando su consumo. Si ocurre un atragantamiento, la rapidez en la actuación se vuelve vital: «Conocer maniobras básicas como la maniobra de Heimlich puede salvar vidas y evitar secuelas neurológicas graves». Eso, recalca la Moliner, mientras se contacta con los servicios de emergencia.

El tiempo es crucial. Más de cinco minutos sin oxígeno pueden causar lesiones cerebrales irreversibles, y más de diez minutos pueden llevar a la muerte cerebral. Saber cómo actuar rápidamente puede marcar la diferencia entre una recuperación completa y un daño permanente, explica la especialista.

Cuando un atragantamiento provoca anoxia cerebral, pueden surgir secuelas graves como crisis epilépticas, trastornos motores y visuales y alteraciones en la conciencia. «La prevención no arruina la celebración, sino que la hace más segura para todos. Ser conscientes del riesgo y tomar pequeñas precauciones puede marcar una gran diferencia», concluye la doctora.