Defienden la viabilidad de la planta, pese a que la dirección planea el cese de la actividad industrial
25 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La plantilla de la división porriñesa de la granitera Levantina se niega a tirar la toalla y asumir el cese de la actividad industrial de la planta de As Gándaras y por ello trabaja a contrarreloj para buscar a un grupo inversor «que queira continuar coa actividade». La parte social ha diseñado un calendario de reuniones con las administraciones para solicitar su ayuda en este proceso y así «salvar unha parte importante dos postos de traballo na nosa empresa».
Los sindicatos CC.OO., CIG y UGT están en plena negociación de un ERE con la dirección de Levgranite que, en principio, supondrá un centenar de despidos y prescindir de la actividad industrial en esta empresa. «É imprescindible para nós a celeridade na búsqueda dun inversor, xa que nos quedan quince días para finalizar o periodo de consultas do ERE», son conscientes. «Levamos dúas semanas de reunións e xa nos sobrou tempo para coñecer que a vontade desta dirección é marcharse de O Porriño si ou si», critican.
La plantilla porriñesa de Levantina ha defendido desde el inicio de las negociaciones de los despidos la viabilidad de esta planta, capaz de producir 700.000 metros cuadrados de piedra natural al año. «Opoñémonos frontalmente á formulación da dirección de Levantina, tanto pola forma de despedimentos masivos, como polo fondo do que pretenden. É dicir, pechar a planta nuns meses e facer negocio coa venda dos terreos», se posicionan.
No descartan más movilizaciones como la del pasado 16 de enero para hacerse oír y lograr otra solución a su situación actual, que supondría el cierre de una empresa histórica.