Entre 9 y 11 años de cárcel para dos jóvenes por violar a una chica en Vigo y grabarlo con el móvil
VIGO
Tendrán que abonar 17.000 euros a la víctima, de 18 años, a la que la agresión sexual le dejó una huella psicológica
08 may 2025 . Actualizado a las 17:42 h.La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, ha condenado con penas de entre 9 y 11 años y medio a dos jóvenes acusados de agredir sexualmente, de forma conjunta, a una joven de 18 años en un domicilio de Travesía de Vigo. Los dos implicados alegaron que habían mantenido un trío con la joven de forma consentida y como prueba mostraron ante el tribunal el vídeo que uno de ellos grabó durante el acto sexual conjunto. Sin embargo, el tribunal les replica que la joven se quedó traumatizada y en el vídeo si bien se oyen exhalaciones, estas pueden ser de dolor o una simple respiración.
El tribunal le ha impuesto a uno de ellos once años y medio de cárcel, pues también ha sido considerado autor de un delito de descubrimiento y revelación de secretos por haber grabado los hechos con su vídeo mientras perpetraba el delito. El tribunal le benefició con la atenuante simple de reparación parcial del daño por consignar 7.500 euros.
Al otro procesado, le ha impuesto nueve años de prisión. Ambos deberán pagar una indemnización conjunta a la víctima de 17.000 euros.
La joven conoció a sus agresores sexuales en un pub de la zona de copas de Vigo, en la calle Areal, el 4 de septiembre del 2022, cuando tenía 18 años. La joven había acudido con varias amigas. Al cerrar uno de los establecimientos, el grupo, incluida la víctima, continuaron la fiesta en el domicilio de un amigo de uno de los procesados. Una vez allí, la joven mantuvo relaciones sexuales consentidas en una habitación con uno de los dos condenados. Cuando ambos estaban en el interior de la dependencia, el resto de miembros del grupo, a excepción del otro sospechoso, se marcharon del domicilio tras una discusión. En ese momento, según señala el tribunal, el procesado entró en la habitación y, tanto él como su amigo, que ya estaba en el interior, agredieron sexualmente a la víctima. Los magistrados subrayan que la joven «les pidió que parasen, pero no lo hicieron». Además, añaden que uno de ellos grabó la violación con su teléfono móvil.
La sala se basó en el testimonio de la víctima objeto de la agresión sexual y la que se grabó con el móvil y de los policías que la asistieron y la vieron en shock. Un «elemento corroborador muy importante» es la huella psíquica que le dejó la agresión sexual a la afectada, que confirmaron tres peritos. Ella no se contradijo, añaden los magistrados. Cabe presentar recurso ante la Sala de lo Civil y Penal del TSXG.
El acusado que grabó el vídeo intentó probar con las imágenes ante el tribunal que fueron unas relaciones consentidas y que la joven se sentía cómoda. Al contrario, ella les acusaba de haberla sedado, aunque no hay constancia ni prueba de ello.
Los implicados afrontaban 18 años de cárcel. Otro implicado, acusado de jalear a los agresores sexuales, fue absuelto al no quedar probado que él estuviese en el escenario.
El tribunal señala que la víctima quedó dañada socialmente y, además, presentaba una gran ansiedad, sobre todo por las noches en que se despertaba al soñar y recordar los hechos acontecidos, no siendo capaz de volver a dormir o descansar. También tenía mucho miedo a estar sola y buscaba compañía con la que distraerse de sus pensamientos.