Al juzgado de guardia le sorprende que persistan estas víctimas
11 jun 2025 . Actualizado a las 16:37 h.La víctima de una estafa presentó ayer una denuncia en el juzgado de guardia de Vigo porque perdió 7.000 euros de sus ahorros al creer que le estaba enviando el dinero a su hija, que la apremiaba para que la ayudase. La familiar le hizo varias transferencias por el móvil sin sospechar que había caído en una ciberestafa conocida como el «timo de la hija en apuros», un fraude clásico de la ciberdelincuencia. Una falsa hija envía un mensaje SMS a una madre diciendo que le pasa algo y le urge para que le envíe un bizum a un teléfono móvil distinto del habitual porque el suyo está estropeado. Nunca menciona nombres, solo términos generales como «mamá».
Fuentes judiciales admiten que, a pesar de ser muy conocido, muchos ciudadanos siguen cayendo en el timo de la falsa hija, lo que les parece «sorprendente» debido a que el cebo es burdo. Pese a ello, continúa un goteo de denuncias. El botín suele superar los mil euros.
En el último caso denunciado en Vigo, tiene la agravante de que, cuando la perjudicada envió la primera remesa de varios miles de euros a la que creía que era su hija, el ciberdelincuente le pidió más: «Mándame, mándame más». Y la persona engañada le envió nuevas transferencias hasta completar los 7.000 euros.
Los expertos judiciales recomiendan tomar precauciones a los ciudadanos que reciban uno de estos mensajes sospechosos. El consejo más básico es llamar al teléfono habitual de la hija (y no al aparece en el SMS) para que confirme, de viva voz, que necesita la transferencia. Si la allegada no sabe de qué le están hablando, es que es un timo.
El juzgado de guardia también está recibiendo numerosas denuncias por la estafa de la llamada telefónica del gestor bancario. En una modalidad, un cliente recibe un mensaje que le alerta de que un intruso intenta vaciar su cuenta y le dan un número de teléfono para que se comunique con su asesor bancario, que es un cómplice, el cual le sonsaca sus contraseñas y claves de banca digital, y luego lo desvalijan.
En otra versión, el cliente recibe la llamada de un supuesto gestor de banca que le alerta de un riesgo de seguridad y luego le pide sus claves y contraseñas.
Las denuncias de ciberestafas, como al inicio de la investigación no hay fechas o lugares concretos desde los que opera el ciberdelincuente, se reparten entre los ocho juzgados de instrucción de Vigo. A veces, tribunales de otras provincias se inhiben a favor de Vigo porque el estafador opera en este partido judicial o porque una mula retiró el botín desde su cuenta abierta en la ciudad.
En Vigo, en el primer trimestre se denunciaron 768 ciberestafas, lo que supone un 7,7 % más.