Los drones del IEO-CSIC identifican 35 ballenas en aguas de las Rías Baixas

Alejandra Pascual Santiago
alejandra pascual VIGO / LA VOZ

VIGO

IEO-CSIC Miguel Álvarez

Investigadores de la campaña RorquGal toman muestras de microbioma espirado de catorce individuos para caracterizar la genética de estas poblaciones gracias a un vehículo no tripulado

25 sep 2025 . Actualizado a las 01:07 h.

El Instituto Español de Oceanografía (IEO) consolida el empleo de drones para constatar la recuperación de las ballenas en aguas de las Rías Baixas. En el marco de la campaña RorquGal,  los investigadores han registrado la presencia de 63 rorcuales en la costa sur de Galicia y han logrado foto-identificar 35 ejemplares. Sobre vehículos aéreos tripulados a distancia, la comunidad científica está avanzando en el conocimiento de esta familia de cetáceos al «comparar con los catálogos existentes en otras regiones», analiza el organismo del CSIC.

A bordo del catamarán Chocolate, los investigadores realizaron ocho salidas mar adentro entre finales de agosto y principios de septiembre. Trabajaron sobre un extenso escenario, hasta el límite de la plataforma continental pues «las condiciones oceanográficas predominantes situaron los grandes afloramientos de microalgas y la presencia de kril en latitudes más septentrionales y lugares más alejados que en años anteriores», asevera Camilo Saavedra, investigador del centro oceanográfico de Vigo y responsable de esta ilustrativa campaña. Pese a esta circunstancia, «y a la dificultad sobrevenida por las condiciones meteorológicas de temporales otoñales, el número de ballenas siguió siendo muy elevado», agradece.

El empleo de esta tecnología aérea también ha permitido al equipo de Rorqugal tomar muestras de microbioma respiratorio de catorce individuos así como obtener fragmentos de tejido y de agua para caracterizar genéticamente a estas poblaciones y descubrir su estado de salud, como explica Paula Suárez, investigadora del IEO. El equipo ha podido capturar los singulares soplos de las ballenas al colocar placas de Petri con velcros de alta adherencia en la parte superior de la aeronave, que terminan empapándose con la espiración. 

Las imágenes tomadas a vista de dron amplían la perspectiva para descubrir la biometría de los rorcuales e identificar «las manchitas blancas que tienen detrás del espiráculo», uno de los rasgos más reveladores de la especie Balaenoptera physalus. Este distintivo ayudará a la comunidad científica a averiguar si las familias que pasan al oeste de las Rías Baixas son las mismas que frecuentan otras regiones, por ejemplo, del mar Mediterráneo.