El CTAG se propone despedir a 150 personas y hacer un ERTE de 110 días para toda la plantilla

VIGO

El centro tecnológico de la automoción justifica la propuesta en las dificultades que atraviesa el sector
16 oct 2025 . Actualizado a las 20:23 h.Más despidos en el CTAG. La dirección del Centro Tecnológico de la Automoción de Galicia planteó en una reunión mantenida al mediodía con los sindicatos un ERE que afectará a 150 trabajadores. La fundación justifica la reducción de su cuadro de personal en la delicada situación que atraviesa el conjunto de la industria desde hace varios años, según fuentes conocedoras del proceso de negociación. Extinguir contratos no es la única medida que prevé el centro gallego. También advirtió la necesidad de activar un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) de 110 días laborales de suspensión.
Los sindicatos tienen ante sí varias semanas de negociaciones para analizar una propuesta que propone prescindir de un 15 % de los trabajadores. La fundación emplea a 893 personas entre sus instalaciones de O Porriño y los diferentes equipos que trabajan en el seno de las empresas para las que desarrollan proyectos innovadores. A comienzos de noviembre, la parte social y la empresarial están emplazadas a nuevos encuentros para debatir las condiciones de las finalizaciones de contrato y la aplicación del ERTE que «podría afectar potencialmente» a todo el cuadro de personal, como ha avanzado hoy la parte contratante.
La que se ha planteado este 16 de octubre es la tercera ronda de ceses que activa el CTAG. Pero la mala situación que atraviesa el centro lo advierte el hecho de que esta vez se haya puesto encima de la mesa una propuesta social que a priori afectará a muchas más personas. El pasado julio, CIG y CC.OO. dieron a conocer ocho despidos disciplinarios. Entre finales de agosto y comienzos de septiembre se prescindió de otra quincena de empleados (trece objetivos y dos disciplinarios más). Ambos sindicatos rechazaron su aplicación. El nacionalista tomó la delantera con una movilización ante la sede en O Porriño para denunciar un proceso que consideró «fraudulento» y Comisiones advirtió en verano que se trataba del «síntoma de un deterioro estructural que no puede seguir ignorándose» y solicitó la intervención de Inspección de Trabajo.
Durante los encuentros, la fundación no ha ocultado la «mala racha económica» que atraviesa. Según la información trasladada a los sindicatos, los ingresos se han reducido en más de un 15 % y la actividad este 2025 también se está viendo lastrada por la pérdida de proyectos con los que se contaba a comienzos de año y que hubieran ayudado a dinamizar la facturación.
Otro hecho que denuncia la parte social en esta etapa de turbulencias es la «escasa implicación» que detecta por parte de algunos de los socios fundadores de esta fundación sin ánimo de lucro concebida para impulsar la innovación y la excelencia tecnológica de la industria de la automoción y de la movilidad. Comisiones les exigió en una misiva que tomaran decisiones que permitieran garantizar el futuro de la fundación al considerar que «el proyecto fundacional está perdiendo respaldo real por parte de algunos de sus principales impulsores».
El patronato del CTAG está representado por Stellantis, la Zona Franca, Abanca, el Ceaga, GKN, Copo Ibérica, Magna Seating, Dalphi Metal, Grupo Antolín, Gestamp, Borgwarner, la Consellería de Industria, el Igape y la Universidad de Vigo. La agrupación sindical advierte que en la deriva del centro también influye que algunas de estas empresas «están externalizando capacidades que tradicionalmente residían en el CTAG». Comisiones denunció este tipo de prácticas ante representantes de la Consellería de Empleo, Comercio y Emigración y del Igape en una reunión mantenida el pasado 25 de septiembre.
Los 150 despidos que ayer se propuso la fundación gallega no ha pillado desprevenidos a los sindicatos. Su dirección ya les había advertido en verano las dificultades que padece el conjunto del sector, que están haciendo mella en el centro de la automoción, y que se verían en la obligación de activar nuevos mecanismos para la reorganización de la plantilla. Pero sí sorprende la cifra de candidatos y que la medida venga acompañada de un ERTE que, en principio, afectará al conjunto de empleados.
Antigüedad
Un aspecto que ha tenido en cuenta la empresa a la hora de ejecutar los despidos anteriores es la antigüedad de los trabajadores, seleccionando a personal con menos de dos años de trayectoria en el centro. Además, la representación social recuerda que se les ofreció verbalmente la posibilidad de retorno cuando mejore la situación.