Cañaílla, el ibis eremita que se aficionó a O Val Miñor, vuelve a Galicia

Pedro Rodríguez
pedro rodríguez NIGRÁN / LA VOZ

VIGO

EL naturalista cojo

El comportamiento del ave que nació en Alemania sorprende a los expertos

26 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

«Levaba tempo desaparecido en Cádiz e mira ti... Está aquí de novo», dice Manuel Sobrino, conocido como El Naturalista Cojo. Él fue el primero que anunció la aparición en Galicia de Cañaílla, el ibis eremita que sorprendió apareciendo de repente el año pasado en la comunidad. Llegó volando en noviembre del año pasado tras cruzar el Miño desde Portugal y se quedó varios meses en la Foz de O Miñor, el espacio natural que comparten Nigrán y Baiona. Durante ese tiempo fue su vecino más famoso, inmortalizado en centenares de fotos mientras buscaba comida en las rotondas, muy cerca del tráfico. Las personas que paseaban por allí se acostumbraron a él hasta que un día levantó el vuelo y desapareció.

Muchos temían que hubiera sido atropellado, pero apareció en San Fernando (Cádiz) en verano. Volvió al lugar que desde la que comenzó su migración al norte el año pasado. Cañaílla nació en mayo de 2023 en el zoo de Halle, en Alemania, y, un año después, llegó a Jerez para ser liberado en marzo del 2024 en el municipio gaditano de Barbate. Llegó a España a través del proyecto Eremita, un programa que impulsa la reintroducción a la naturaleza de una especie que los antiguos egipcios veneraban como la reencarnación del dios de la escritura, Tot, pero que, miles de años después, se encuentra en peligro de extinción. La caza indiscriminada y la destrucción de su hábitat provocó que la especie casi desapareciera por completo en estado salvaje el siglo pasado y que solo sobreviviera en libertad en pequeñas colonias de Marruecos y de Siria. En Europa su población se mantuvo en zoológicos hasta que comenzó su reintroducción.

«No esperábamos que volviera a Cádiz y menos que retornara a Galicia», explica Alfonso Alonso, coordinador del Proyecto Eremita de la Sociedad Gaditana de Historia Natural. Cañaílla fue avistado esta semana en Ponte Caldelas. «Es nuestra estrella. Es el ejemplar que más lejos se ha ido hasta ahora y estamos aprendiendo mucho con él», indica. El biólogo recuerda que el ibis es una especie que se encontraba extinta a nivel salvaje en Europa y que solo conocían sus comportamientos en el zoo. Seguir las rutinas de los ibis eremita está siendo para Alfonso y sus compañeros un «aprendizaje constante».

El coordinador del Proyecto Eremita en la Sociedad Gaditana de Historia Natural no se atreve a confirmar si Cañaílla se quedará en Galicia o volverá a Andalucía, pero tiene la hipótesis de que volará rumbo sur cuando entre en su etapa reproductiva. Tampoco se atreve a confirmar porque el ibis ha encontrado su lugar habitual en la comunidad, pero recuerda que el espacio de la Foz do Miñor es muy similar al que tenían en Galicia. Además, explica que, aunque no se sabe con exactitud, había ejemplares de ibis en el norte peninsular en el pasado. «Hay fósiles con características similares a los de los ibis y también en los tratados de cetrería medieval se habla de cuervos calvos, que por la descripción también nos hace pensar que eran ibis eremitas», explica.

Sobrino también indica que el recorrido de Cañaílla también le parece «moi raro» porque esperaba «que acabe criando na súa colonia en Cádiz e xa ten case a súa idade reprodutora». Él ahora estará atento con su cámara por si el ibis eremita vuelve a buscar comida en el Miño.