Una divorciada pide 65.000 euros por sus tareas del hogar y el exmarido enseña al juez fotos de paellas que él cocinó en Vigo

e. v. pita VIGO / LA VOZ

VIGO

Edificio de la Ciudad de la Justicia de Vigo, en una imagen de archivo
Edificio de la Ciudad de la Justicia de Vigo, en una imagen de archivo M.MORALEJO

El excónyuge mostró al tribunal un hilo de WhatsApp donde comentaba a su mujer e hija: «Comida de hoy hecha, solo hay que decidir pasta o arroz». La Audiencia de Pontevedra reconoce la «encomiable dedicación» de él a la casa y la familia durante el matrimonio.

05 dic 2025 . Actualizado a las 00:45 h.

Una divorciada de Vigo reclamó a su exmarido una indemnización de 65.585 euros porque, según dijo, durante 23 años de matrimonio, ella se dedicó en exclusiva al cuidado y tareas del hogar, compaginando sus cargas del trabajo doméstico con su carrera profesional. Su exesposo, un funcionario, probó al juez con fotos que él, al menos desde el 2017, también cocinaba, hacía bricolaje, cumplía recados de su mujer e iba con frecuencia a buscar a su hija al colegio. La Audiencia Provincial le da la razón al exesposo porque ve probado, por fotos y documentos, que él se vino encargando con «encomiable dedicación» al cuidado del hogar y de la familia, «pues no cabe duda de que asumía buena parte de las tareas domésticas».

Para probarlo, le mostró al magistrado fotos que compartió en el chat de WhatsApp del clan familiar y que incluían platos de paellas, pescado, ensaladas o pasta que él había cocinado. A mayores, el exmarido enseñó conversaciones familiares en las que él le comunicaba a su esposa e hija: «Comida de hoy hecha, solo hay que decidir pasta o arroz», «Ahí os queda la comida, portaos bien», «comida en la mesa, voy a recoger a mi hija», «comida al horno, voy a buscar a la hija».

A mayores, el exesposo mostró trabajos de bricolaje que él había realizado en la vivienda, gestionó citas que le encargaban su esposa e hija para ir a la ITV o arreglar el televisor.

La exesposa perdió su primera batalla legal en el Juzgado de Primera Instancia número 12 de Vigo, en el procedimiento de divorcio celebrado en febrero del 2025 porque el magistrado concluyó que ambos cónyuges se turnaban para atender a la familia porque tenían distintos horarios. Ella apeló a la sexta sección de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo, la cual en una sentencia del 6 de octubre del 2025, vuelve a dar la razón al hombre. Le imponen a la exmujer el pago de las costas del juicio, aunque esta puede recurrir en casación al Tribunal Supremo.

La sala ve acreditado que, por parte del exesposo, hubo «una dedicación sustancial e importante al hogar y a su familia, que excedió con mucho de lo que podría considerarse una colaboración puntual». El tribunal recuerda que los gastos más importantes, como los suministros de la vivienda, los vehículos, el colegio de la hija o la mascota, se cargaban en la cuenta del exmarido, en la que él ingresaba su nómina. Por contra, la mujer percibía su salario en otra cuenta de su exclusiva titularidad y las rentas por un alquiler privativo. La Audiencia recalca que la mujer, tras quedarse en el paro, amortizó un piso propio pese a que en la vivienda familiar adeudaban 130.000 euros de hipoteca.

Los magistrados rechazan el pago de la indemnización a la exmujer porque los hechos «contradicen manifiestamente el alegato de que fue ella en exclusiva la que se encargó del cuidado del hogar y la familia, pues ocurre que incluso en el período que abarca del año 2018 al 2021, el más largo que estuvo sin trabajar, los wasaps desmienten frontalmente sus alegatos», aunque compartiera con su exesposo tareas domésticas cotidianas.