La ganadora de 100.000 euros del Rasca: «Aquí sigo, trabajando en la cafetería»
A CAÑIZA

Andrea, de A Cañiza, destinará el premio a pagar la entrada de una vivienda
31 ago 2025 . Actualizado a las 21:56 h.La suerte llegó en forma de boleto y encontró a Andrea detrás de la barra. Esta camarera de 31 años que trabaja en la cafetería panadería Pirucho, en A Cañiza, acaba de ganar 100.000 euros con un Rasca y Gana Platinum de la ONCE, uno de los premios grandes de esta modalidad. Pero, lejos de tirar el delantal, continuó trabajando como siempre. «Esto fue el lunes», cuenta Andrea, todavía incrédula. «Normalmente el vendedor pasa por el bar donde trabajo y juego algún rasca. Ese día cogí uno y… me tocó».
La noticia se la confirmó en ese mismo momento Alexandre, el vendedor de la ONCE, con un abrazo incluido: «Me dijo: “Te acabo de dar 100.000 euros” y yo respondí “vale”. Él me abrazó y me soltó: “¡Despierta!”».
El dinero ya tiene destino: «Será para la entrada de una casita, porque no da para mucho. Hacienda ya me quitó el 20 % tan pronto lo ingresé. Al final fueron 88.000 euros… y me venían de lujo esos 12.000 que se quedaron por el camino».
El boleto premiado lo vendió Alexandre, que cubre rutas en A Cañiza y Covelo. «De momento es el premio más grande que he dado», asegura. «El último, de mil euros, lo di el día 15 de este mes, también en A Cañiza. Pero este es el importante y me alegro de que quedara en el pueblo».
Natural de Cerquido, en Budiño, Alexandre celebra que la suerte se quedara cerca: «Justo cuando se lo di, la máquina marcó incidencia. Ella se quedó que no se lo creía y le tuve que dar un abrazo. Además, era el último boleto que me quedaba de ese libro. Me alegré tanto como si me hubiera tocado a mí».
Andrea, mientras tanto, sigue asimilando el golpe de fortuna entre cafés, pan y pasteles: «La verdad es que fue como… “ah, vale”. Me quedé en shock. A día de hoy, aún no me lo creo. Pero, mira, aquí sigo trabajando», afirma esta vecina de A Cañiza de 31 años a quien la suerte le ha sorprendido con un buen pellizco que le servirá para pagar la entrada de su futura vivienda.