Una pareja de California se muda a Baiona por recomendación de Google: «Fue un flechazo»

Monica Torres
Mónica Torres BAIONA / LA VOZ

BAIONA

Mónica Torres

Planearon su jubilación con algoritmos, pero dicen que fue la inteligencia de los vecinos, no la artificial, lo que les acabó de convencer

16 oct 2024 . Actualizado a las 08:47 h.

La firma de software Qlik, en un ejercicio de informática ficción, ya demostró que la historia sería distinta si Colón hubiese podido diseñar su ruta con las nuevas tecnologías. No habría descubierto América porque conocería con antelación la mejor ruta a las Indias y, con la misma, Pinzón tampoco habría arribado a Baiona con la carabela. Sin embargo, cinco siglos después la brújula de Google ha traído desde California hasta el primer puerto de Europa que recibió noticia del Descubrimiento a un matrimonio que buscó «el mejor lugar del mundo para disfrutar de su jubilación».

«La inteligencia artificial nos trajo a España y después, a Baiona, pero la inteligencia humana de sus vecinos fue la que nos enamoró», sostienen Liliana Castañeda y Walter Rossmann. Ella es de México y él, de Austria. Se conocieron en Massachusetts y, tras 34 años juntos con dos hijos en común, comenzaron a planificar su jubilación en el 2019 cuando ya llevaban veinte asentados en California.

Liliana, doctora en Comunicación y profesora universitaria, se había retirado dos años antes. A Walter, experto de hotelería, turismo y matemáticas, le quedaban aún otros tantos, pero en el 2019 le diagnosticaron párkinson. «Comenzamos a planear y lo que teníamos claro era lo que buscábamos, así que utilizamos los algoritmos para diseñar nuestra hoja de ruta. Era una inteligencia artificial aún bastante rudimentaria, casi todo a través de Google, pero nos sirvió para ubicar el destino», explican. En lugar de pasar horas investigando, la pareja introdujo los indicadores que iban a priorizar la elección, aunque la dejaron realmente en manos de Google: «Fuimos acordando qué necesitábamos y sumándolos a los programas para que delimitara nuestro norte».

Tras el diagnóstico médico, había condiciones indispensables para planificar su lugar de descanso. «Antes, habíamos pensado en subirnos a una cámper para recorrer el mundo, pero luego nos pareció demasiado estrés, especialmente por la enfermedad», indica Liliana. En el catálogo de deseos para que Google buscara por ellos pidieron que se cruzaran los indicadores que, a su juicio, son los que más les convenían. «Los filtros entremezclaron los resultados de los mejores países en cuanto a democracia, salud pública, clima, agua, transporte y criminalidad porque en Estados Unidos el uso de armas es ya una epidemia», afirman. «Cuando comenzamos aún estaba la inteligencia artificial en sus albores, así que el inicio fue más rudimentario, pero también con buscadores inteligentes que cruzaban los datos para hacer listados, nos fueron indicando que el mejor lugar para vivir era España», señala la pareja que acaba de encargar la reforma de su nueva casa en Baredo.

Reconocen que, a día de hoy, «la búsqueda habría sido mucho más rápida aunque, a la vista del resultado final, también nos habría enviado directamente a Baiona». Consideran que «fue un flechazo».

Únete a nuestro canal de WhatsApp

Pisaron España en septiembre y aprovecharon para visitar a unos amigos en Olite, «pero nuestra guía virtual nos aconsejaba Galicia por el clima, el medio ambiente, la temperatura media o la economía diversa». En ese ámbito elegido al combinar variables realizaron una prospección que acabó en cuanto conocieron Baiona: «El broche final lo puso la inteligencia humana, porque nos conquistaron sus gentes y servicios, y ya compramos la casa».

El lunes fueron a Austria por problemas familiares y dejaron en obras su casa, «pero la mudanza acabará antes de verano». Hasta Kirk les enamoró: «Venimos de más de 18 años de sequía...».